Una cuadrilla de la Empresa Provincial de la Energía (EPE) fue asaltada ayer a la tarde en Casilda y Liniers, en el barrio rosarino de Ludueña (zona sur de la ciudad), cuando se encontraban haciendo trabajos de reparación del servicio eléctrico. Desde el gremio afirman que los trabajadores “están muy expuestos”.
Cuando las cuadrillas deben realizar tareas de mantenimiento en barrios considerados de alto riesgo, ya es protocolo que las mismas sean acompañadas por patrulleros. Sin embargo, esta vez se trataba de una zona residencial, sin mayor peligrosidad que la promedio.
Varios sujetos abordaron a los operarios en plenas tareas de mantenimiento sobre unos cables subterreneos, sustrayéndoles herramientas y pertenencias personales.
En declaraciones a LT8 el titular del gremio de Luz y Fuerza, Alfredo Romero denunció: “la inseguridad es lamentable para cualquier persona, en este caso los trabajadores de la EPE que trabajan en la calle están muy expuestos, como decimos siempre, cuando vean una chata de la EPE tengan en cuenta que los compañeros lo único que están haciendo es trabajar para resolver el problema de los usuarios“.
En ese sentido Romero dijo que en este año sólo hubo dos “denuncias por parte de los trabajadores” y ratificó que en reuniones con la empresa se mantiene un protocolo de ser acompañados por móviles policiales a zonas que pueden resultar peligrosas.