El desastroso estado en que se encuentra la ruta nacional 33, que profundizó su deterioro en los últimos años, suma ahora la incertidumbre de un nuevo gobierno nacional que todavía no designó los responsables de Vialidad, no estableció un presupuesto y vocifera a los cuatro vientos que “la obra pública se reducirá a cero”.
El administrador del Distrito 7 de Vialidad, Fabio Sánchez, que se mantiene por el momento desde la gestión anterior, estuvo hoy en Rufino junto al intendente Natalio Lattanzi, quien viene reclamando la continuidad de los trabajos de bacheo y repavimentación en el tramo que va hacia General Villegas, que hoy es el más deteriorado. “Hay una obra vigente que la administra el Distrito 1 de Buenos Aires, pero la empresa está haciendo poco y nada porque no tiene precios ni certezas de cuándo van a cobrar, ni la designación del administrador. Mientras tanto tenemos que hacerle frente a la situación y tratar de aportar soluciones”, indicó Sánchez en su contacto con los medios rufinenses.
La novedad que comunicó el funcionario es que Vialidad se encargará de tapar los baches en la zona de Piedritas para dar transitabilidad hasta que la empresa se pueda hacer cargo, “y seguiremos con la Municipalidad de Rufino entregando rap (rezagos de arena y piedra) para hacer el recalce de banquinas”.
Fabio Sánchez, administrador de Vialidad.
La realidad es que Vialidad cuenta con “muy poca gente” para la conservación de las rutas, la empresa que estaba haciendo la autopista se retiró hace rato y “necesitamos hacer ese trabajo de mantenimiento en colaboración con los municipios, como ha sido el caso de Rufino con el intendente Lattanzi”.
Sánchez admitió que desde la asunción de Milei “no tuvimos ninguna bajada de línea, pero está claro que este año sólo habrá mantenimiento, todo dependerá del presupuesto que vamos a disponer, hay obras que ya están licitadas para bacheo y repavimentación en la ruta 33 que se intentarán concretar, pero todavía no se firmó el contrato de adjudicación y no sabemos si habrá presupuesto”.
Además expuso que “hoy nos cuesta hasta cortar el pasto, porque había licitaciones centralizadas que hoy no se están haciendo, y contamos con una sola cuadrilla para 2.800 kilómetros de rutas nacionales. Estuvieron trabajando en la ruta 11 y la próxima semana estarán en la 33 desde Casilda hacia Rufino, con dos máquinas simultáneas. Por eso es fundamental el aporte de municipios y comunas que siempre prestan su colaboración”.
En esta compleja coyuntura económica, con nulas expectativas de que se pueda reflotar el proyecto de la autopista 33, el administrador de Vialidad confió en que al menos se disponga de los recursos para el mantenimiento de las rutas porque “sino se producen roturas, accidentes y muertes, para eso tendrá que haber recursos, aunque seguramente no habrá para obras”, concluyó.