Por Mauro Camillato
La importancia de las próximas elecciones legislativas en la ciudad quedó demostrada con el armado de las listas, ya que nadie se guardó ningún nombre y decidieron “tirar toda la carne al asador”. Así aunque el primer escalón son las Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) que se realizarán el próximo 13 de agosto, y luego los comicios del 22 de octubre, todos están proyectando para lo que realmente les importa, esto es la contienda a intendente del 2019. Es que después de 22 años de un gobierno del mismo color (desde la asunción de Roberto Scott en 1995) los opositores sienten que cierto “olor a fin de ciclo” se percibe en nuestra ciudad. Mientras el oficialismo demostró que no “entregará los trapos” fácilmente y se empeña en resistir.
El oficialismo no se rinde
Y queda claro que el oficialismo no se rinde ya que decidió incluir en su lista a los nombres de mayor reconocimiento, más allá que eso signifique desmantelar las distintas áreas municipales. Así el primero y el segundo lugar en la nómina estarán ocupado por los dos “supersecretarios” que cuenta el Ejecutivo local, Patricio Marenghini (Secretario de Ambiente, Servicios y Espacios Públicos) y Alejandra Filippetti (Secretaria de Desarrollo Social). Pero además el tercer lugar es para la mano derecha de Freyre desde sus comienzos en la política, la actual secretaria de Participación Ciudadana, Norma Orlanda.
Es que en Marconi y San Martín saben que perder estas elecciones legislativas de manera amplia sería definitivamente empezar a despedirse de a poco, pero una derrota con escaso margen todavía los dejaría en carrera. Por su puesto un triunfo no solo les daría la posibilidad de la continuidad del ciclo luego del 2019, sino que además impondría el nombre de Marenghini como la cara visible de la renovación en el espacio (si Freyre cumple con lo que viene sosteniendo insistentemente y no se presenta a una nueva reelección).
Claro que previamente deberán imponerse de manera contundente en las PASO contra la lista que impulsa el diputado provincial, Julio Eggimann y que lleva como primer candidato al ex funcionario municipal, Ricardo Aime y a la otra nómina que tendrá a la camporista Paola Bravo. Ambos pretenden como máximo imponer un nombre en el segundo lugar de la lista para las elecciones definitivas de octubre dentro de la boleta del PJ.
El enriquismo va por todo
Por su parte, desde el enriquismo sueñan con un triunfo rotundo en las legislativas locales que les permita empezar a prepararse para ocupar la intendencia a partir del 2019. De hecho hasta elucubran que si esa victoria es amplía se pueden dar el lujo en el 2019 de seguir sosteniendo a Lisandro Enrico como senador y postular a Leonel Chiarella o en todo caso a Juan Ignacio Pellegrini, para las elecciones locales. De esta manera cumpliría el otro sueño de los enriquistas que es monopolizar el poder político en la ciudad y en la región.
De todos modos primero tendrán con el dúo, Pellegrini y Santiago Meardi, superar ampliamente a sus pares socialistas en las PASO. Espacio este último que realiza una gran apuesta en estas elecciones presentando como cabeza de lista a un joven totalmente nuevo en la política local, Leo Calaianov. Por su puesto, en el Partido de la Rosa se darán por satisfechos con lograr obtener el segundo lugar en la lista definitiva para la contienda de octubre. Para colmo el socialismo tuvo una muy mala noticia en este sentido ya que la confirmación de la postulación de su ex aliado, Roberto Meier, por el Frente Popular y Social, podría birlarle algunos votos.
PRO y Nuevo Horizonte: ex aliados que no quieren quedar afuera
Por su parte, el PRO y Nuevo Horizonte pretenden no quedar afuera de la pelea eleccionaria y necesitan para eso evitar la polarización de la política local.’
Así luego de la ruptura de la alianza que construyeron para las elecciones del 2015, cada uno por su lado aspira a tener una performance que les permita por lo menos retener las dos bancas que dejan.
De este modo Nuevo Horizonte tiene el desafío de por lo menos repetir los números de la última contienda electoral y acudirá con una sola lista capitaneada por la líder del espacio y con figuras completamente nuevas. Así la secundaran el muy joven Ignacio Ferrari (21 años), Natalia Doctorovich (veterinaria) y Pablo Baronio (comerciante).
En tanto, el PRO necesita no “desangrarse” en una Primaria que parece la más complicada de todas. Es que los distintos integrantes de las diferentes listas tienen una enemistad manifiesta que queda en evidencia en cada una de sus declaraciones. El internismo del macrismo venadense ya es histórico y contradice los apostolados de un partido que a nivel nacional intenta transmitir otra forma de hacer política.
Lo cierto es que por un lado el actual edil Francisco Paris (ex Nuevo Horizonte) intentará lograr su reelección. Mientras desde hace tiempo ya largó su campaña el titular de Anses local, Darío Jeannot y en los últimos días sorprendió la aparición de otra lista que cuenta con el aval del actual diputado nacional, Ricardo Spinozzi y postula en primer lugar a Patricia Bertram.
Massismo reconvertido
Por otra parte, aparecen dos listas que en principio abrevaban en el massismo pero que finalmente irán por afuera con agrupaciones locales. Así con la denominación de Venado Renace insiste con su postulación el ex funcionario municipal, Franco Balzaretti. A la vez bajo el nombre de Nueva Ciudad, aparece como primer candidato el ex macrista, Marcelo Majul.
Para ambas listas el desafío será lograr permanecer de pie luego de las Primarias y por lo menos tener un papel decoroso en la generales.