Antonio Bonfatti admitió que no vive cómodo ni tranquilo desde que su casa fue objeto de un feroz ataque a balazos. Aunque aseguró que no bajará los brazos, confesó que ya no se siente una persona libre, aún siendo el mismo gobernador de Santa Fe. Ésta y otras revelaciones compartió este lunes en el aire de Radiópolis, el programa que conduce Roberto Caferra en Radio 2 Rosario.
“Salgo con custodia permanente, me molesta bastante pero no puedo obviar que hasta el año pasado era una persona libre, podía ir al centro y comprar lo que necesitaba”, sorprendió el gobernador. “No tengo miedo–advirtió–pero me cambió el estilo de vida y me molesta bastante”, continuó. Luego, agregó en ese sentido: “Es feo, nunca valoré la libertad en todo su sentido: poder disponer de hacer lo que uno quiere, y hablo de cosas simples.”
“Es muy triste. Me digo: «Pucha, soy el gobernador y tengo que vivir esta situación», es el termómetro de que tomamos medidas y a muchos los ha puesto en una situación difícil. Pero no voy a bajar los brazos. Tirotearon mi casa y no me van amedrentar”, subrayó en referencia a al atentado a su casa, al que vinculó con el combate contra narcotraficantes y policías vinculados con el delito.
E insistió, ante la pregunta sobre si lo que le pasaba a él no es termómetro también de lo que sufre toda la sociedad frente al avance de la inseguridad: “No voy a aflojar, hay mucha gente que debió cambiar su vida, es parte de la realidad y nos duele”.
Bonfatti se mostró preocupado por la actual situación social atravesada por relaciones conflictivas y violentas. Consideró que la realidad está atravesada por enfrentamientos interpersonales y la pérdida de valores ancestrales vinculados al trabajo, la amistad y la familia. Para el gobernador esta combinación es tierra fértil para el narcocriminalidad, una situación que ató a todo el mapa nacional, e incluso de Latinoamérica.
En este punto, no descartó que se produzca un quiebre entre el socialismo y sectores medios que históricamente lo apoyaron en Rosario, que exigen cambios y respuestas a sus reclamos de mayor seguridad. “Todos los ciudadanos tienen derecho a vivir mejor, pero esto no es soplar y hacer botellas. Me gustaría tener la respuesta y la solución pero un gobernador no puede resolver una sociedad entera donde todos fuimos cómplices de permitir que se impongan los desvalores”, analizó y advirtió al respecto: “No pasa sólo en Santa Fe y nos incluye a todos los que vivimos en una sociedad de consumo, donde se degrada a la mujer, donde no se escucha y en donde se perdió el valor del esfuerzo. Cuando nos dimos cuenta el mal ya estaba instalado en la pública”.
Sobre el rol del gobierno ante este panorama, estableció: “Creer que el gobierno va a cambiar esto de forma inmediata es creer que se resuelve con una varita mágica que no existe. Entiendo la angustia pero apelo a que nos tratemos mejor entre todos”.
Néstor
A 4 años de la muerte del ex presidente, Bonfatti lo recordó con especial respeto. “Significa un antes y un después de la presencia del Estado en el concierto de la política argentina. Puso en valor el Estado, dio un paso muy importante como regulador de la vida cotidiana”, señaló y añadió a modo de opinión: “Revalorizó la política cuando veníamos de una etapa donde era una mala palabra. Fue un político de fuste que cambió la política del país”.