Por Mauro Camillato
Otra vez a último momento, (en este caso gracias al salvataje de la provincia) el intendente pudo evitar un paro de actividades de los trabajadores municipales.
El viernes a última hora del mediodía, el siempre bien predispuesto, secretario general de la Asociación de Tabajadores Municipales( ATM), Francisco Villaba, no resistió más las presiones de los delegados de las diferentes áreas y ante la falta de respuesta del Ejecutivo que seguía insistiendo que la única manera que tenía de abonar el aguinaldo era de forma desdoblada, decidió mediante un escueto comunicado informar de la medida de fuerza.
Pero cuando los trabajadores se aprestaban a salir de su tarea diaria con la seguridad a cuestas de que el lunes se podían tomar el día, un llamado telefónico y un movimiento de último momento permitió revertir la situación. Así el mismo José Luis Freyre fue el que anunció que finalmente en los próximos días se les abonará en forma íntegra el aguinaldo correspondiente.
Es que en este caso el rescate vino desde el gobierno provincial, fue el propio ministro de Gobierno, Rubén Galassi, el encargado de disponer el giro anticipado de parte de la coparticipación. Y a pesar que Freyre lo quiso presentar como casi una obligación que tenía el Ejecutivo santafesino para con el Municipio, (“desde enero lo teníamos pedido”, remarcó), él sabe que en este caso recibió un “salvavidas”. Es que como el mismo término lo dice lo que recibió Intendencia fue un “anticipo”.
Gremio – Freyre una relación desgastada.
Lo cierto es que este conflicto vuelve a comprobar que Freyre no solo ha sufrido un importante desgaste con la población venadense (solo hay que remitirse a lo que sucedió en las últimas elecciones) sino que también se trasladó a los trabajadores municipales. Muy lejos queda esa etapa donde el sindicato le perdonaba absolutamente todo al intendente, y a pesar que Francisco Villalba lo sigue llamando de manera intimista (José) y el cuadro con su foto sigue colgado en su oficina, algo mutó.
Quizás también hay que sumarle la difícil situación que vive el sindicato que sigue con su proceso eleccionario judicializado.
De todos modos algo se rompió y por más que hayan zafado del paro en esta oportunidad, la posibilidad de una medida de fuerza quedó abierta y ya no alcanza con las palabras y “las palmaditas” de Freyre para solucionar los posibles conflictos.
Además quedó en evidencia la endeble situación financiera municipal porque si bien es cierto que tuvieron que afrontar un importante aumento otorgado en paritarias y que son varias las administraciones locales provinciales que están apretadas; también es cierto que en esta oportunidad Venado Tuerto es uno de los pocas ciudades que tuvo dificultades para pagar el aguinaldo. Según el dato lanzado por el sindicalista Gustavo Martínez de ATE Rosario (que vino a interceder en el conflicto y generó el enojo de Villalba) solo tuvieron el mismo problema Chabás (que enfrentó la renuncia de su intendente y se encuentra sumida en una importante crisis institucional ) y la pequeña localidad de Cañada Rosquín.
Y más allá que desde el Ejecutivo lo desmienta, también quedó flotando la idea que este problema tiene su origen en los desmedidos gastos realizados para intentar dar vuelta los resultados de las Primarias.
Por otro lado párrafo aparte merece la situación de los trabajadores temporarios del Municipios, quienes siguen en un endeble marco legal y que al igual que los permisionarios del estacionamiento medido carecen de los beneficios de los empleados estatales. Ahí también existe un posible futuro foco de conflicto que alguna vez el gremio tendrá que afrontar.