Durante el 2023 hubo un total de 85 siniestros viales con 12 víctimas fatales sobre la ruta nacional 33, de acuerdo con la estadística elaborada por la ONG Construir Hacer. Los números corresponden al tramo comprendido entre las ciudades de Pérez y General Villegas (unos 340 kilómetros) y reflejan una disminución de hechos en relación al año anterior, aunque es casi idéntico el número de fallecidos.
Además de lo mencionado, en el último año hubo 52 personas lesionadas por siniestros viales en ese tramo de la ruta 33, con 141 vehículos involucrados. “En comparación con 2022, hubo un descenso en los siniestros, que habían sido 132, pero prácticamente se repitió el número de víctimas fatales (13 contra 12) y 82 personas lesionadas. Sumando los cuatro años de trabajo que llevamos realizado, fueron 412 siniestros viales con 55 víctimas fatales, 248 lesionados y 646 vehículos involucrados”, indicó Enzo Navarro, uno de los referentes de la ONG creada en la ciudad de Casilda.
El descenso de los accidentes puede atribuirse a diferentes causas, aunque no es un dato menor que la sequía provocó que las cosechas fueran magras, con una notoria reducción en el número de camiones circulando por la ruta. De hecho, las estadísticas de 2023 se acercaron mucho a los números de 2020, año de la pandemia.
“Nosotros en 2021 hicimos un monitoreo vial sobre la ruta en los meses de cosecha y registramos que diariamente por la zona urbana de Casilda transitaban más de 8.200 vehículos, de los cuales el 55 por ciento eran camiones trasladando cereal”, puntualizó Navarro para medir la relevancia del transporte de carga.
Lo que sí está claro es que la disminución de los siniestros no obedeció a que la ruta 33 presente mejores condiciones: “Hay cada vez más baches, no hay arreglos, están mal las banquinas y ya no se habla de la autopista 33, un proyecto anhelado que se iba a iniciar en Rufino pero está abandonado y no se hizo ni un metro de asfalto”, lamentó.
A la hora de realizar la estadística, desde Construir Hacer dividen a la ruta en varios tramos y durante 2023 el que tuvo más siniestros fue el de Pérez-Casilda, seguido por el de Casilda-Firmat.
Problemática en cifras
Construir Hacer se formó por un grupo de vecinos que pasó por distintas situaciones personales (muchos de ellos son familiares de víctimas de siniestros viales) y en términos institucionales la tragedia de Monticas, de la que se están cumpliendo siete años, fue un gran empuje para empezar a trabajar en el tema: “Todos sabíamos que había una importante siniestralidad, en la ruta 33 pero no sabíamos la cantidad, ni el sentido de los vehículos ni el sitio geográfico. Hoy tenemos toda esa información procesada y a disposición de los funcionarios nacionales y provinciales, que son los que pueden tomar decisiones”, recordó Navarro.
Además del peso de la producción (la ruta une a dos puertos importantes como los de Bahía Blanca y Rosario), “en el medio estamos los que transitamos por cuestiones de estudio, laborales o médicas, con siniestros que se dan da manera casi diaria”, algo que queda expuesto en el trabajo de esta ONG que pone en cifras objetivas la magnitud del problema.