Desde la Secretaría de Control Urbano y Convivencia lanzaron un plan de relevamiento barrial, donde se constata la existencia de autos abandonados, se los registra fotográficamente y se intima a sus titulares registrales, a efectos de notificarlos de sus responsabilidades y eventuales sanciones. A la fecha, con seis barrios relevados, se detectaron más de 300 vehículos en estado de abandono.
“La idea principal es que los vehículos sean retirados, no que terminen en el corralón, pero si no hay un retiro voluntario avanzamos con las medidas correspondientes. Por otro lado, en la intimación al titular le dejamos en claro que transcurridos seis meses del secuestro, podemos llevar adelante el proceso de descontaminación y compactación”, advirtió el director de Inspección General, Nahuel Pasquinelli, a cargo del relevamiento.
Citaciones y plazos
Conforme la normativa vigente, el Tribunal Municipal de Faltas envió citaciones a los titulares y/o responsables de los automotores abandonados, otorgando un periodo de comparecencia de diez días para hacer valer los derechos sobre el rodado, bajo apercibimiento de retiro por la fuerza pública.
Vencido el plazo anterior, serán intimados por otro plazo de 20 días a acreditar derechos ante el Juzgado de Faltas sobre todo el material y/o vehículo descripto. Cumplido el mismo, sin acreditación de derechos sobre los bienes, el Municipio quedará autorizado a incorporar el vehículo a su patrimonio y a donarlo en calidad de chatarra a la Asociación de Bomberos Voluntarios de Venado Tuerto, con el cargo de someter el material al proceso de descontaminación, compactación y disposición final, en el marco del Programa Nacional de Compactación.
“Con este programa esperamos solucionar los problemas que ocasionan en los barrios los autos abandonados, que generan molestias de circulación y contaminación, entre otros inconvenientes”, añadió Pasquinelli.