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La información fue publicada por el sitio web La Política Online (LPO), y viene firmada por el periodista rosarino Luis Bastus. Asegura que entre los interesados en quedarse con el Swift está el polémico y procesado ex concesionario del Ferrocarril Roca, Sergio Taselli –que le vendió al Municipio, luego de una varias veces fallida transacción, los 6 colectivos recientemente puestos en funcionamiento–.
La información aparece luego de que JBS publicara un comunicado informando su resistencia a "vender o alquilar la planta".
El cierre del Swift de Venado Tuerto "activó el interés de distintos capitales que merodean el negocio, pero que por ahora se abstienen de presentar una oferta formal”, afirma LPO.
Debe recordarse que tanto el intendente José Luis Freyre como su secretario de Gobierno Rubén Paulinovich habían confirmado que había empresas agropecuarias, cooperativas, feetloteros, supermercados y otras firmas del sector de la carne interesadas en adquirir o alquilar la planta frigorífica local.
Según LPO los nombres detrás de esas categorías son, en primer lugar, el de la cooperativa Agricultores Federados Argentinos (AFA), vinculada a la Federación Agraria que lidera el dirigente Eduardo Buzzi (la misma acopia anualmente unos 3,4 millones de toneladas de granos, por citar su negocio más grueso), también habría mostrado interés la otra gran mega cooperativa cerealera: Asociación de Cooperativas Argentinas (ACA).
De acuerdo a lo publicado hoy LPO también se sumaron a la puja “firmas frigoríficas que entablaron diálogo directo con los brasileños y que llamaron a la Municipalidad de Venado Tuerto para dar a conocer su interés”. Una de ellas sería nada más y nada menos que la reconocida empresa frigorífica rosarina Mattievich SA, empresa con ocho plantas en Rosario, Casilda, Carcarañá, Puerto General San Martín y Arroyo Seco. Esta firma tiene en total tiene una capacidad instalada para faenar 63.000 cabezas vacunas y 8.000 porcinos, si la exportación no estuviera intervenida. Produce para el consumo interno y para exportación, procesa fiambres y embutidos, hamburguesas y menudencias exportables.
Otra firma del sector interesada sería el Frigorífico Rioplatense SA, que controlaba el empresario Rodolfo Constantini hasta que en agosto pasado, necesitado de fondos para cancelar deudas y jaqueado por un conflicto laboral que terminó en 80 despidos, pasó a manos del empresario Carlos Oliva Funes. Este era, justamente, el dueño de la marca Swift hasta que en 2005 se la vendió a los brasileños de JBS-Friboi por una suma cercana a los 120 millones de dólares. Oliva Funes, que supo presidir el consorcio exportador ABC, de esta manera intentaría retomar una de las plantas que poseía hasta hace seis años.
El otro interesado sería nada más y nada menos que el polémico y procesado empresario , “que suele aparecer cuando hay una fábrica en desgracia, sea del negocio que sea”: Sergio Taselli, que en el rubro cárnico actualmente posee Santa Elena Alimentos, en Entre Ríos, aunque el año pasado amenazó con cerrar la planta y dejar 80 empleados en la calle.
El polémico empresario supo entrar y salir (a veces hasta con procesamientos judiciales incluidos) en Yacimientos Carboníferos Río Turbio, en Trenes Metropolitanos (previo reto público del entonces presidente Néstor Kirchner), en Parmalat Argentina (a la que compró por un dólar, para luego concursar), en la generadora rosarina Central Térmica Sorrento. También compró y concurso Altos Hornos Zapla, después de comprarla quebrada. Todas empresas que terminó de "rematar" luego de adquirirlas en quiebra o semifundidas. El ingeniero italiano no es extraño a la ciudad, debe recordarse era el nombre detrás de la firma en convocatoria de acreedores que ofreció los 6 colectivos adquiridos por gestiones del reasumido secretario de Servicios Públicos local, Juan Vidal. Los mismos, debe recordarse, tardaron un año en ser transferidos al Municipio –acción de la Justicia mediante–.
Ahora Taselli podría reaparecer en Venado Tuerto en una escena que también conoce bien: como antecedente en el rubro cárnico, Taselli compró en 2005 el gigantesco frigorífico entrerriano Santa Elena cuando éste cayó en la bancarrota, por 3,5 millones de dólares. En 2010 obtuvo 324 toneladas de Cuota Hilton y abrochó buenos contratos para exportar a Venezuela, que vencieron en junio pasado. Como parece ser su costumbre, caídos esos contratos amenazó con cerrar y obligó al gobierno de Sergio Uribarri a gestionar la continuidad.
De acuerdo a LPO, los últimos de la lista, y tal como lo había afirmado el propio Freyre, son algunos productores que poseen feedlots en esta zona y en el sur cordobés. De acuerdo a lo informado el portal de noticias, estos no tienen intención de asumir “el gerenciamiento de la planta, sino que su intención es integrarse como socios menores de quien tome las riendas” para asegurarse el destino de su producción.
Además de los interesados mencionados, en la semana se había conocido a otro candidato, la cadena de supermercados La Anónima que opera el frigorífico homónimo, con capacidad de faena de 16.000 cabezas al mes, en la ciudad de Salto. Debe recordarse que tanto Freyre como Paulinovich habían mencionado que también había empresas supermercadistas interesadas en la planta.