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El Tribunal Supremo de Justicia de Santa Fe analiza el destino que deben tener 227 millones de pesos que están en la quiebra del ex Banco Integrado Departamental. El Banco Central (BCRA) supone que el total de esos fondos le corresponden por el otorgamiento irregular de redescuentos al ex-Banco Integrado Departamental. Mientras que la Sindicatura del ex banco, apoyada por los ahorristas danmificados, reclaman para sí la disposición de dicho monto y de esa manera completar el recupero de los ahorros perdidos.
El BCRA es la entidad que pretende quedarse con esos fondos porque considera que les corresponden por el otorgamiento irregular de redescuentos al ex-Banco Integrado Departamental. Un verdadero escándalo, si se tiene en cuenta que las autoridades que en los 90s dirigían la institución que regula funcionamiento todos las entidades financieras que operan en el país, aprobaron sin objeciones la expansión desmedida de un banco que otorgaba créditos, en claras maniobras de lavado de fondos, a empresas calificadas como “deudores incobrables” por la propia entidad federal. Debe recordase que en alusión a los ahorristas, el entonces presidente del central durante la crisis del BID , Pedro Pou, dijo que a estos había que decirles “Alpiste, perdiste por depositar en ese banco“. Ninguno de los funcionarios del Central debió ir a juicio.
De contar con esos 227 millones de pesos, la sindicatura utilizaría 120 millones de pesos para cancelar los fondos adeudados a los ahorristas perjudicados por el cierre, que hasta el momento recuperaron poco más del 70 por ciento de sus depósitos a valores nominales.
Tal cual lo destaca la Sindicatura en su página web, la discusión por los fondos comenzó cuando la Corte Suprema de la Nación dió lugar a un recurso presentado por el BCRA contra la sentencia dictada en su momento por el juez de la causa Marcos Ferrarotti, quién había rechazado tal pedido en primera instancia. De esa manera, la Corte Nacional decidió reenviar las actuaciones a sus colegas del orden provincial para que analice diversos aspectos de su sentencia anterior.
Ante dicha situación la Corte Provincial el último 10 de mayo,resolvió admitir la queja del BCRA y habilitar la instancia extraordinaria y por tanto abocarse a realizar él estudio pertinente para definir a quién le corresponden finalmente los preciados fondos.
El BID funcionó desde el 30 de noviembre de 1978 hasta el 14 de abril de 1995, cuando se dispuso el cierre. Llegó a tener 135 sucursales y al momento de la liquidación 21 mil ahorristas tenían depósitos.
La quiebra se debió al otorgamiento indiscriminado y abusivo de créditos a empresas inviables, con escasa o nula capacidad de repago, vinculadas de distintos modos a directivos de la institución, en claras maniobras de lavados de dinero ilícito.
Ahora, la Corte Suprema de Justicia de Santa Fe debe resolver si los 227 millones de pesos le pertenecen al Banco Central o serán distribuidos por la Sindicatura entre los aproximadamente 19 mil ahorristas.
Fuente: Agenciafe
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