A través de una nota ingresada en el Concejo Municipal, el representante de una de las empresas más importantes y tradicionales de remises de la ciudad solicitó que se adelante la revisión de tarifas del servicio, teniendo en cuenta la incidencia de los elevados niveles de inflación. Más allá de esta coyuntura particular, se plantea la necesidad de modificar la ordenanza vigente, para que el análisis de los costos se realice cada cuatro meses, y no de forma semestral como ocurre actualmente.
“Ante la situación actual económica que atravesamos y los masivos aumentos de combustibles e insumos para los vehículos, es que solicitamos a ustedes, rever la ordenanza Nº 4459/14”, establece el texto presentado por el propietario de Remises Venado Tuerto, Ariel Sobrero.
El planteo reside en que actualmente se dispone un aumento de tarifas cada seis meses, pero sostiene que se debería “acortar ese plazo”, tomando un período de cuatro meses para evaluar el reajuste. “Esto sería más favorable a la hora del aumento, ya que no sería un impacto tan fuerte en el bolsillo de los usuarios, no nos bajaría de golpe el trabajo y estaríamos de alguna manera más cerca de los costos que se manejan”, sostiene.
El Concejo deberá evaluar el pedido de los remiseros.
Así, ante una coyuntura de extrema complejidad que también afecta a los ingresos de todos los trabajadores de taxis y remises (ya sean dueños de vehículos como choferes y las mismas remiserías), solicita que se tenga en cuenta la posibilidad de que el aumento o reajuste pactado para noviembre, pueda aplicarse en los primeros días de septiembre.
En principio, desde el gobierno local entienden que es razonable el planteo y lo evaluarán a partir de la próxima semana, cuando se empiecen a analizar los costos para la próxima revisión de tarifas.
Valores vigentes
El último aumento de tarifas de taxis y remises se aplicó a partir del 19 de mayo pasado, con una variación del 49 por ciento, quedando la bajada de bandera en 250 pesos y la ficha cada 100 metros o 60 segundos de espera en 30 pesos. Es decir que un viaje de treinta cuadras hoy supera los 1.000 pesos de valor.
La ordenanza 4459, sancionada en 2014, establece que se aplicará una fórmula que contempla el costo real del servicio, teniendo en cuenta la variación de precio de los siguientes insumos: amortización del vehículo, equipo de GNC, consumo promedio de combustible, consumo promedio de aceite, de filtro de aire, filtro de aceite y filtro de combustible, consumo de cubiertas, batería, alineación y balanceo de cubiertas, reparaciones mecánicas mayores, seguro, monotributo, Ingresos Brutos, patente automotor, costo de la base, renovación de oblea GNC, sueldos y aportes patronales.
Tal como sostiene la nota ingresada al Concejo, el próximo incremento debería darse recién en noviembre, motivo por el cual algunos representantes del sector entienden que es necesario ante la creciente inflación, adelantar ese proceso de revisión.