CiudadEl paísPedrola: “La nueva ley de VIH es de avanzada y representa una ampliación de derechos”

Juan Miserere01/07/2022
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El Senado aprobó el jueves por amplia mayoría la ley nacional de respuesta integral al VIH, las hepatitis virales, la tuberculosis e infecciones de transmisión sexual (ITS), que fuera impulsada por organizaciones de la sociedad civil y reemplazará a la vigente ley 23.798, derogando un decreto de 1995 que establecía la realización de pruebas diagnósticas para la detección de la enfermedad en el ingreso y permanencia en las fuerzas armadas y de seguridad.

El médico venadense Miguel Pedrola, que se desempeña como director científico para América Latina y Caribe en AIDS Healthcare Foundation (AHF), destacó que se trata de una legislación “de avanzada” que apunta a “garantizar derechos para las personas que viven con VIH”.

Pedrola estuvo presente en el Congreso para presenciar la votación de la ley (viajó especialmente a Buenos Aires desde Ushuaia) y se mostró muy conforme con este resultado: “La anterior ley era de 1990 y el tratamiento efectivo recién estuvo en 1996, por lo tanto en ese momento el objetivo fue evitar la estigmatización con un código para los pedidos de laboratorio y mantener el trabajo epidemiológico”, recordó el profesional.

Hoy el escenario es totalmente diferente y “una persona con un tratamiento efectivo va a tener una carga viral indetectable y por lo tanto no transmite el HIV a otras personas. Por fuera de eso hay muchas cuestiones no médicas que habían sido dadas en derechos hacia las personas pero no estaban legisladas, y esta ley apunta a asegurar esos derechos”, valoró.

El médico infectólogo remarcó que se trata de “una ley de avanzada, la venimos militando desde 2014 y una de las reuniones a nivel federal la hicimos en Venado Tuerto, y después de ocho años logramos su aprobación”.

Entre las principales novedades se destaca la prohibición para que se pida el test de VIH en los exámenes médicos preocupacionales, pero además “se pone de manifiesto que los portadores del virus tienen otras problemáticas y hasta ahora solo se garantizaba su tratamiento con anti retrovirales, pero hay problemas psicológicos, de obesidad o renales, que tienen que ver con los tratamientos, y a partir de ahora deben recibir tratamiento gratuito”.

Otro tema importante es que aquellas personas que llevan más de diez años viviendo con VIH, que realizaron más de 20 años de aporte y tienen 50 de edad, pueden acceder a una jubilación. También hay aspectos que apuntan al empoderamiento científico, incentivando la investigación sobre nuevos tratamientos y la producción de las drogas en el país.

Estamos muy conformes con la ley que aprobó, ahora que implementarla y llevarla a la vida real, que es la segunda parte después de la aprobación”, advirtió Pedrola.

Cifras y objetivos

En la actualidad, en la Argentina se realizan 5.500 diagnósticos anuales de VIH, “un número alto dentro de la región, pero además hay 1.500 personas que fallecen todos los años de Sida, lo que demuestra que la atención no es la óptima. Por eso alentamos la realización de testeos”, expresó Pedrola.

Más allá de estas cifras, el referente de AHF garantizó que a nivel público los tratamientos están muy bien, pero que “en lo privado siempre tenemos algunas dificultades con algunas obras sociales, por eso estamos trabajando fuerte en una red federal de abogados para que estas personas puedan hacer valer sus derechos de salud y cuando alguna obra social no cumpla se haga efectivo por una acción legal”. Más allá de eso, en general “las personas tienen acceso a un tratamiento efectivo, sabiendo que en el HIV a veces lo más importante no es lo médico sino lo social”.

Pedrola sostuvo que toda persona que vive con VIH y obtiene un tratamiento acorde, llegará a ser indetectable. Desde la OMS se trabaja con el concepto del 95-95-95, es decir que “se busca que el 95 por ciento de la personas que tienen el virus lo sepan, que el 95 por ciento de ellos esté en tratamiento y que el 95 por ciento sea indetectable”. El objetivo es lograr esas cifras entre 2025 y 2030, pero la realidad es que “hoy en Argentina el 60 por ciento de las personas que están en tratamiento son indetectables. No somos optimistas en que se logre ese objetivo”.

Para finalizar, el médico expresó: “Creo que la pandemia retrasó esos tiempos, más allá de los compromisos políticos de cada uno de los países, en Argentina no se logró el objetivo del 90-90-90 en 2020, ojalá que esta ley permita entender sobre la necesidad de invertir en salud”.

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