Una paciente oncológica de Venado Tuerto denució que la obra social Osprera no está cubriendo su tratamiento y decidió hacerlo público en busca de respuestas, como paso previo a las intimaciones formales que pueden terminar en la Justicia. Desde la agrupación solidaria Oncoamigas VT, ámbito desde el que gestionan pelucas solidarias para aquellas mujeres que se encuentran bajo tratamiento, acompañan el reclamo para poder amplificar la voz.
Susana Jaqueline Martínez tiene 37 años y transita desde mayo del año pasado un cáncer de mama. Comenzó su tratamiento en un centro oncológico privado de la ciudad, pero en noviembre su obra social (perteneciente al sindicato Uatre) dejó de dar respuestas y cubrir la medicación necesaria, cuando le faltaban dos sesiones de quimioterapia para poder llegar a la cirugía. “La obra social está haciendo abandono de persona”, denuncian.
En la desesperación que implica estar atravesando un problema de salud y tener que gestionar por respuestas que no llegan, logró continuar su tratamiento en el Hospital Gutiérrez, accediendo a sendas aplicaciones de quimioterapia en enero y febrero. Sin embargo, la situación actual es paradójica: no puede continuar con la atención en el efector público porque Osprera no acepta darla de baja, pero tampoco le autoriza el tratamiento.
“Ella en este momento está desamparada, se le complica la enfermedad, porque lo tanto está desesperada, muy asustada y angustiada”, exponen desde Oncoamigas, este grupo de mujeres que se unen a partir de haber tenido (de una u otra forma) contacto con la palabra cáncer.
El caso llegó llegó a oídos de las autoridades, por eso este lunes la concejala Florencia Giacometti (también en su condición de abogada) la estará acompañando a Susana a presentar una intimación a la obra social en su sede de Maipú y San Martín, con el objetivo de obtener una respuesta inmediata. En caso de no lograrse, se agota la vía administrativa para pasar posteriormente a un amparo judicial.