El gobierno de Venado Tuerto comenzó la semana pasada con las intervenciones en las calles del centro para implementar el nuevo sistema de carga y descarga, que entrará en vigencia a partir del 1° de noviembre. “El objetivo es solucionar una deuda histórica que tiene la ciudad”, destacó el subsecretario de Movilidad, Eugenio Bernabei, resaltando que “esta vez cambiamos el enfoque, porque siempre se buscaron soluciones proponiendo medidas ya impuestas en otros lugares”, pero en esta oportunidad “con el Centro Comercial e Industrial, a través de su presidente Sebastián Turdó, se abrió una mesa de diálogo que llevó su tiempo y se pudo consensuar esta ordenanza, en donde lo que buscamos es que prime el sentido común”.
El principal problema con la carga y descarga de mercadería en el centro es el impacto en la circulación, con vehículos de gran porte parados en doble fila o sobre la mano izquierda obstruyendo el tránsito en horarios pico. “La ordenanza vigente autorizaba la actividad de 6.30 a 9.30, son tres horas en las cuales tienen que estar todos y se generaban problemas”, describió el funcionario.
La nueva ordenanza regirá en principio para la zona comprendida por Rivadavia, Casey, 25 de mayo y Saavedra. Los horarios serán de 6 a 11 y de 14 a 17, con algunas actividades exceptuadas como volquetes y materiales de construcción, al igual que alimentos refrigerados, que deberán hacerlo de 13.30 a 16.30.
“La gran novedad es la instalación de dársenas que van a estar pintadas, lo que implica no gastar en una obra más compleja de infraestructura. Por eso van a estar señalizadas con cartelería”, amplió Bernabei. “Nosotros tenemos hoy la aplicación de estacionamiento medido, que tiene la posibilidad de poder incluir categorías y vamos a sumar a los vehículos que llevan adelante tareas de carga y descarga. Entonces, los permisionarios se van a sumar a los inspectores en el control”, indicó.
El espacio va a estar identificado en verde con un cebrado, con dársenas ubicadas cada 100 metros, muchas de ellas en lugares que hoy ya están con líneas amarillas pintadas. “La mayoría coinciden con espacios de ascenso y descenso de pasajeros que usan taxis y remises, que también se adapta a este funcionamiento, porque son horarios diferentes los de mayor demanda”, adelantó.
“Con esto, apostamos a que deje de haber vehículos estacionados en doble fila o en la mano izquierda para hacer carga y descarga. Es un proceso que entendemos que va a llevar 60 días”, confió Bernabei.
Proceso de adaptación
Desde la semana pasada está abierto el registro para los operadores de carga y descarga para que puedan dar de alta sus vehículos en la aplicación a través de la web del Municipio. La semana pasada se comenzó con la colocación de la cartelería y en estos días se inicia el pintado de las dársenas, lo que generará algunas reubicaciones y reordenamiento de estacionamientos de motos.
“Hasta fin de año habrá un proceso de implementación y desde enero se comenzarán a aplicar las sanciones para aquellos que no cumplan con la ordenanza. Confiamos en que sea un proceso rápido que aporte soluciones porque el proyecto salió de la mesa de trabajo en donde los distribuidores ya estaban sentados, al igual que el Centro Comercial y también los grandes comercios que tienen mayor movimiento”, recordó.
El subsecretario agregó que esta medida no debería reducir los espacios de estacionamiento en el centro, dado que “los lugares que hoy están con líneas amarillas de prohibición de estacionamiento las 24 horas, van a pasar a tener la posibilidad de hacerlo por fuera del horario de carga y descarga. La cuenta rápida que hicimos es que se ganan alrededor de 10 lugares de estacionamiento con parte de esta reestructuración de estacionamiento de motos y de otros espacios”, completó.