En la sesión celebrada este mediodía, el Concejo Municipal autorizó un aumento tarifario del 35 por ciento, a aplicarse en dos tramos, para los servicios de agua potable y cloacas que brinda la Cooperativa de Obras Sanitarias (COS).
Luego de sostener distintas reuniones entre esta semana y la que pasó, los ediles acordaron por unanimidad aprobar un 25 por ciento de aumento que entra en vigencia a partir de la próxima factura para recomponer la tarifa, que presentaba un atraso importante. El 10 por ciento restante se aplicará a partir de junio, pero además desde el Concejo hicieron hincapié en la necesidad de concretar las obras que quedaron postergadas.
Según trascendió, el debate estaba en torno al 30 por ciento de incremento. Desde la Cooperativa pedían un 35 por ciento inmediato, y finalmente se acordó esta salida intermedia.
“En junio habrá un 10 por ciento de aumento pero que también contemplará la existencia de un fondo para obras que se tienen que llevar adelante. De acuerdo a la recaudación que se obtenga y los costos previstos, se podrá ir actualizando para definir las prioridades”, puntualizó el presidente del Concejo, Juan Ignacio Pellegrini.
Básicamente, la intención es “que la COS pueda recomponer su tarifa que quedó muy atrasada, pero al mismo tiempo no retrasar las obras, que son la primera variable de ajuste. Queremos hacer un seguimiento para que las inversiones se concreten”, resaltó el legislador radical.
Obras Sanitarias lleva varios meses pugnando por obtener un aumento en sus tarifas, pero la audiencia pública que planteó en 2019 recién pudo realizarse este mes. En el medio quedó la transición de gobierno en el Municipio y luego la pandemia con el congelamiento de tarifas.
Cuando finalmente pudieron concretar la presentación, la gerente técnica de la COS, Vilma Olivieri, expuso que el atraso tarifario alcanzaba el 61 por ciento contando desde julio del año pasado, y que al sumar los porcentajes del balance vigente (que cierra en junio) las cifras superan el 112 por ciento.
Con las cifras sobre la mesa, y el tiempo transcurrido desde la última actualización, no quedó margen para negar el aumento de tarifa, aunque el poder político local se puso más exigente a la hora de plantear la necesidad de que se retomen las inversiones con nuevas obras.