CiudadPolitica“La intención es darle lugar a gente que quiere ser escuchada y aportar frescura a la gestión”

Juan Miserere18/12/2018
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Todavía Agustín Ferrer transita sus días con la corbata de bancario, que seguramente dejará de lado cuando ingrese formalmente a desempeñarse como Coordinador de Gabinete del Municipio. Lo que no quiere dejar de lado son los principios del cooperativismo que acuñó desde que ingresó al Banco Credicoop, con un rápido ascenso que lo llevó a ocupar un cargo ejecutivo antes de cumplir los 30 años, que celebró hace poco más de un mes.

Su participación en el Partido Solidario le permitió ser candidato a concejal en 2017, y si bien ocupó un lugar casi simbólico en la lista, se mantuvo ligado al gobierno municipal. Recibió algunas propuestas previas para sumarse, pero las declinó; sin embargo ahora José Luis Freyre le ofreció un cargo de tanta trascendencia que no pudo decir que no, incluso sabiendo que el desafío será mayúsculo, con tan solo un año de gestión por delante y en medio de una campaña electoral que promete ser prolongada. Licencia mediante, dejará por un tiempo la corbata, aunque por ahora espera poder seguir jugando al fútbol como lo hace cada sábado y continuar pintándose la cara como murguero, dos pasiones que alimenta.

Es un desafío enorme y el tiempo no es tanto en un principio. Si bien vengo desde afuera, el Partido Solidario viene del movimiento cooperativo y venimos trabajando con la gestión de José desde hace más de cuatro años, hubo candidaturas a concejales en los últimos años y el ingreso de Fabio Fernández como secretario de Desarrollo Económico. Desde el movimiento cooperativo trabajamos con esta gestión porque representa muchísimos de los valores que nosotros tenemos, y compartimos una forma de entender la política, que es estar junto a la gente que más lo necesita, siendo un espacio de distribución y redistribución de recursos”, explica Ferrer sobre su incorporación al gobierno local.

Advierte que el 2019 para el Municipio será un año de “recaudaciones cada vez menores y necesidades mayores”, pero que no se pueden descuidar inversiones en salud y educación, por ejemplo. Y si bien elogia el rumbo del gobierno, reconoce que “quizás se necesita una vuelta de tuerca y traer un poco de frescura, y en materia de planificación hay cuestiones que necesitan mayor impulso, convocando a un montón de gente que quiere ser escuchada para participar. Necesitamos lograr que la gente vuelva a tener ganas y se sienta representada por el Municipio”, advierte el flamante funcionario, que recién asumirá en enero.

En tal sentido, asegura que su trabajo principalmente estará orientado hacia la planificación, “con una agenda propositiva de cuestiones que traemos del movimiento cooperativo para trabajar en conjunto y la convocatoria a distintos sectores políticos, sociales y económicos para trabajar en conjunto y paliar lo que pasa a nivel nacional, que influye en lo local”.

-¿Cómo se hace con tan poco tiempo para actuar, para generar esa agenda de propuestas y al mismo tiempo empezar a mostrar resultados?

-No es un trabajo particular, no es que Agustín Ferrer viene al gabinete a solucionar todos los problemas, sino que hay cuestiones de planificación que se vienen trabajando desde hace mucho y les falta sacarlas a la calle y visibilizarlas. El laburo lo vienen haciendo otros, y yo no caigo de un helicóptero y me tiraron adentro, sino que vengo trabajando desde hace un tiempo y ahora es el momento de sacar estos temas a la cancha, reformándolos con la participación de la gente que puede hacer su aporte.

No creo que vaya a haber problemas, el tiempo lo dirá… Si hay que confrontar por alguna cuestión, lo haremos en forma directa. Soy frontal en mi vida personal y laboral, pero siempre apostando al conjunto, porque en forma personal nadie salva a nadie.

-Así como las crisis generan oportunidades, también es cierto que la coyuntura obliga a atender las urgencias y las cuestiones de fondo suelen quedar de lado.

-Eso es lo que nos viene pasando desde hace un montón de tiempo. Algunas veces te dicen que no encuentran respuestas del Municipio, pero empezás a indagar y te enterás que esa persona trabaja porque su hija asiste a un jardín maternal municipal y que la hermana da clases de apoyo en un espacio del Estado local y que la prima recibe una beca que le permite seguir estudiando, que se hicieron gravando a entidades financieras. Hay muchas cosas que se hacen, obviamente que por algo hay cambios porque hay que mejorar, pero eso se logra desde la participación de la comunidad. Las transformaciones se producen si la gente se involucra, yo lo vengo haciendo y ahora me toca desde un cargo de mayor decisión, y mi compromiso es abrir las puertas a todos los que quieran aportar ideas, sin prometer nada y ofreciendo trabajo en conjunto.

-¿No le tenés miedo a la vorágine del día a día del gabinete, donde se observan internas, funcionarios que llevan mucho tiempo y tienen sus mañas?

-Las conclusiones las saco por cuenta propia una vez que estoy en el lugar. Las relaciones humanas son complejas en todos los ámbitos de trabajo, y yo escucho esos comentarios, pero hasta ahora noté la mejor predisposición de todos. Yo simplemente vengo a colaborar, generando nuevas herramientas para mejorar la gestión del Municipio y por ende la gestión de cada uno de los integrantes del gobierno. No creo que vaya a haber problemas, el tiempo lo dirá… Si hay que confrontar por alguna cuestión, lo haremos en forma directa. Soy frontal en mi vida personal y laboral, pero siempre apostando al conjunto, porque en forma personal nadie salva a nadie.

No hay un cargo público de denunciador, a nadie se le paga el sueldo para eso, sino para actuar. Mi oficina va a estar abierta para cualquier dirigente de la oposición para ver cómo atender los problemas, más en un año que socialmente será muy difícil.

-En un año electoral como el que viene sabés que hay gente ávida de ocupar espacios y te van a mirar de costado.

-Puede ser, al que llega nuevo siempre se lo mira de costado. Pero con la mayoría ya vengo trabajando. Sé que ahora no es lo mismo, pero no quiero hacer conclusiones sobre supuestos. La mayor parte de los que están en el Municipio es gente que tiene una vocación de hacer algo por el otro, porque la mayoría de los secretarios podrían estar desempeñándose como profesionales en la gestión privada y seguramente les iría mejor económicamente, pero hay una vocación de tener una ciudad mejor.

-¿Y la oposición?

-Así como soy franco y sincero puertas adentro, lo soy hacia afuera. En un año electoral se tienen que ocupar del tema los que son candidatos, y el que quiera sentarse conmigo a discutir de política, desde afuera o desde adentro, que venga para ver cómo solucionar los problemas de la gente. No hay un cargo público de denunciador, a nadie se le paga el sueldo para eso, sino para actuar. Mi oficina va a estar abierta para cualquier dirigente de la oposición para ver cómo atender los problemas, más en un año que socialmente será muy difícil. Para las elecciones faltan cuatro meses, y la gente está esperando que le solucionen los problemas, no que se peleen para ver quién es el candidato. Obviamente son discusiones que se tienen que dar, pero hay que laburar.

-Ese trabajo entre partidos diferentes es casi imposible en un año electoral…

-Sé que es difícil, pero si en el próximo año seguimos siendo gobierno, como tengo esperanzas de que será, nuevamente haremos un llamado a las distintas fuerzas para trabajar. Y si no se da, voy a estar a disposición como estuve siempre para hacer un trabajo en conjunto.

-¿Observás este recambio generacional en la política local como un proceso interesante? Hay varios dirigentes sub 40 o incluso sub 30 que van ganando espacios en los partidos.

-Es interesante tender puentes entre las distintas generaciones. En el banco se da mucho, porque viene de las cajas de crédito, con dirigentes de vasta trayectoria y nosotros vamos ganando lugar. Siempre es buena la frescura y la energía que podemos aportar los más jóvenes, pero también es bueno escuchar al que tiene un recorrido y te dice que te vas a chocar la pared, y si vas a hacerlo por lo menos ir con las manos para adelante y el impacto sea más suave. El recambio se tiene que dar en conjunto, la juventud por si sola no es un atributo, porque hay jóvenes que hacen la misma vieja política de hace treinta años, como hay mayores que se adaptaron a los nuevos tiempos y son representativos de la época.

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