También los gimnasios esperan su momento para retomar la actividad, siempre y cuando sean aprobados los protocolos sanitarios que, entre otras cosas, deberán imponer el distanciamiento social y reorganizar el espacio físico del establecimiento.
En tal sentido, el gobierno provincial envió a la Nación el pedido de habilitación para “prácticas deportivas que no impliquen contactos físicos, por turnos, en espacios abiertos o suficientemente ventilados”. Y la misma línea sigue el Municipio, elevando el protocolo a la provincia para su aprobación.
“Desde el municipio reconocemos y promovemos la importancia del ejercicio físico, que también ofrece beneficios psicosociales, pero es nuestra responsabilidad permitir el reinicio de esta actividad cumpliendo el protocolo sanitario”, aclaró el secretario de Producción, Mauro Nervi.
El protocolo elaborado por el Municipio indica que deberá fijarse un cronograma entre turnos, para hacer la limpieza de los elementos utilizados en las rutinas y ventilación; y activar una serie de medidas para garantizar la higiene en los espacios utilizados por usuarios y entrenadores (uso individual de toallas, elementos de hidratación y tapaboca homologado).
Se deberá tomar la temperatura a personal y clientes, activando el protocolo de Covid-19 si es mayor a 37.5º; cada cliente deberá presentar su declaración jurada sobre el estado de salud; no se permitirá el ingreso de mayores de 65 años, de aquellos con sintomatología Covid-19 o patología preexistente.
La sala de musculación deberá mantener entre alumnos una distancia de 3 m2 y sin posibilidad de compartir elementos. Y las clases grupales deberán tomar la cantidad total de m2 del salón dividido diez (Ej.: diez alumnos como máximo en un salón de 100 m2).