La jueza Paula Borrello decidió en las primeras horas de la tarde de hoy dictarle la prisión preventiva a Max Talavera, el propietario de la empresa Max Construcciones denunciado por estafa por un grupo de clientes que entregaron el anticipo correspondiente y no recibieron su vivienda de acuerdo a lo pautado.
A partir de los argumentos planteados por el fiscal Damián Casullo, la jueza consideró varios aspectos para arribar a esta medida, como la extensión del daño causado, la apariencia de responsabilidad en los hechos imputados y consideró que la empresa terminó siendo un escenario para engañar a personas sabiendo que no iba a cumplir lo acordado.
La prisión preventiva se dictó sin plazos, más allá que la defensa puede apelar u ofrecer otras opciones, permaneciendo por el momento alojado en la alcaidía de Melincué, donde ya había sido trasladado durante el fin de semana desde la provincia de Formosa.
“La decisión satisface por ahora la pretensión de la Fiscalía, principalmente porque se vio configurado el hecho de estafa que nosotros sosteníamos”, admitió Casullo, quien contó que la defensa expresó que hay voluntad de parte de Talavera de acordar con las víctimas un resarcimiento, pero no hubo ningún plan concreto. Sí se ofreció como caución la vivienda del padre del acusado, ubicada en la ciudad de Laguna Blanca, pero debe ser evaluada por la Justicia.
Durante la audiencia, que se extendió por varias horas, Max Talavera decidió realizar una breve declaración donde esbozó una justificación de su accionar, argumentando que todo fue causa de problemas financieros de la empresa. No obstante, el fiscal insiste: “Nosotros consideramos que fue el escenario para engañar a personas e inducirlas por error a entregar dinero y vehículos por algo que nunca iba a cumplir”.
Por las viviendas industrializadas son cuatro las denuncias que se presentaron, todas radicadas en Venado Tuerto, y hay una quinta denuncia contra Talavera realizada por el club Los Andes de San Eduardo, donde el acusado se desempeñó un tiempo como presidente y sacaba combustible de la estación de servicio en la que trabajaba en beneficio propio (según lo denunciado), generando una deuda que asciende a los 160 mil pesos.
De impacto nacional
El caso de Max Talavera cobró relevancia nacional dado que fue detenido el pasado 18 de agosto en la ciudad de Laguna Blanca, en Formosa, donde estaba participando de la campaña como candidato a diputado nacional suplente en un frente electoral opositor al gobernador Gildo Insfran.
El revuelo electoral se circunscribió a Formosa, con denuncias de persecución política contra el propio Talavera esgrimidos por la líder de la lista, algo que por supuesto nada tiene que ver con la situación del detenido. De hecho, las denuncias fueron radicadas en mayo y recién ahora se conoció su candidatura. De hecho, todo esto estuvo completamente al margen de la audiencia.