A comienzos de 2009, gran parte del debate público en la ciudad estuvo concentrado en la situación de calle Rivadavia entre San Martín y Belgrano, cuya circulación era de doble mano y se estudiaban opciones para modificarla, hasta que se sancionó una ordenanza estableciendo el actual ordenamiento del tránsito. Ahora, 15 años después, el tema regresa a la agenda pública a partir de un proyecto de ordenanza presentado por el edil oficialista Guillermo Barbey, quien plantea la necesidad de reducir el flujo vehicular en las calles Juan B. Justo y Juan B. Alberdi, facilitando la circulación sobre Belgrano y Rivadavia.
A partir de un proyecto que lleva el acompañamiento de un grupo de vecinos con sus firmas, Barbey propone que esa cuadra de calle Rivadavia vuelva a ser de doble mano, es decir que aquellos que circulan por San Martín puedan doblar a la derecha al llegar a la intersección y tomar calle Belgrano.
“Esta modificación contribuirá a alivianar los problemas de congestión vehicular, especialmente en horas pico, y a mejorar el acceso a las arterias principales de nuestra ciudad como es la calle Belgrano, la cual es muy concurrida por contar con diversos locales comerciales”, argumenta el autor del proyecto en su presentación.
Con esta modificación se descomprimiría la zona de Juan B. Justo en su cruce con Juan B Alberdi, que hoy “es una zona de conflicto donde se pide la colocación de lomos de burro”.
Entre los argumentos para proponer este cambio, Barbey agregó que “en algunos horarios el estacionamiento de Runciman entre las calles Alberdi y Rivadavia se encuentra saturado. Y si se continúa por Alberdi hasta Alem en horarios pico del colegio Nacional se generan focos de peligro por la cantidad de alumnos, motos, bicicletas, autos y peatones”.
Esto traería aparejado una revisión del estacionamiento de calle Rivadavia (hoy autorizado en ambas márgenes) y la readaptación del semáforo de Runciman.
Idas y vueltas
La doble mano de calle Rivadavia entre San Martín y Belgrano estuvo vigente a partir del año 2002, con el objetivo de darle vitalidad a la “cuadra larga” de calle Belgrano, del 0 al 200. Sin embargo, ese formato tuvo una corta duración y se revirtió en 2010, a partir de la ordenanza 3694 aprobada por el Concejo Municipal el 18 de marzo del 2009.
Allí se estableció que ya no se podría pasar de calle San Martín a Belgrano vía Rivadavia, sino que los conductores tendrían que dar la vuelta a la manzana por Juan B. Justo, Juan B. Alberdi y Runciman para acceder a la tradicional arteria céntrica, tal como ocurre en la actualidad.
Esto implicó otras variantes, por ejemplo el cambio de sentido de circulación de Runciman entre Rivadavia y Sarmiento (que también había sido modificado en 2002), mientras que Juan B. Justo continuó siendo doble mano. Además el semáforo ubicado en la esquina de Casey/Alem (que entonces era de dos tiempos) empezó a permitir el giro a la izquierda para quienes circulen por Casey en el sentido hacia las vías del ferrocarril y quieran acceder a Rivadavia.
Pero los problemas con la doble mano en ese tramo de Rivadavia ya habían empezado antes, por eso en 2008 se había sancionado otra ordenanza donde se prohibía el estacionamiento sobre la vereda de números pares, entre Juan B. Justo y Runciman. Un año después se terminaría aprobando la ordenanza que le ponía fin a la doble mano, que finalmente se concretó en mayo de 2010 tras la instalación de los semáforos. Hoy, 15 años después, se reflota el debate en el Concejo y seguramente va a generar distintos puntos de vista y polémicas.