Un nuevo giro sacude la causa judicial iniciada en julio de 2022 que mantenía al joven B.V., oriundo de San Eduardo, acusado de abuso sexual con acceso carnal. En una decisión determinante, el juez de Cámara Tomás Orso resolvió absolver al imputado, revocando así la condena dictada en primera instancia por el juez de primera instancia, Mauricio Clavero.
La audiencia de apelación, realizada hoy, contó con la participación del fiscal de Cámara Fernando Palmolelli, quien representó al Ministerio Público de la Acusación, y del abogado del niño, Guillermo Benavidez, ambos en representación de la acusación. Por otro lado, la defensa del joven acusado estuvo a cargo del abogado Arsenio Domínguez y del asesor de Menores Leandro Carozzo, quien veló por los derechos del imputado en el marco del proceso.
Todos presentaron sus argumentos ante el juez Orso, quien finalmente resolvió absolver a B.V. fundamentando su decisión en “falta de certeza suficiente” para sostener la culpabilidad del acusado más allá de toda duda razonable.
La resolución N°136, emitida en el día de la fecha, señala que si bien se reconocen las circunstancias de vulnerabilidad de la víctima, no existe evidencia concluyente que permita sostener que el imputado haya actuado con pleno conocimiento del estado de la joven en el momento del hecho. Además, el fallo cuestiona algunos aspectos del proceso investigativo inicial, que habrían afectado la solidez de las pruebas recabadas.
El proceso y los hechos
La causa se remonta a la madrugada del 24 de julio de 2022, cuando la víctima, de 16 años, fue encontrada en estado de desorientación en el estacionamiento del boliche Palo Alto en Venado Tuerto. La denuncia, presentada por la madre de la joven, estuvo respaldada por un informe médico que constató lesiones y la presencia de alcohol en sangre (1.31 gramos).
El juez de Primera Instancia, Mauricio Clavero, había condenado a B.V. basándose en la imposibilidad de consentimiento por parte de la víctima debido a su embriaguez extrema, encontrando además ADN del acusado en las prendas de vestir de la joven. Sin embargo, en su apelación, la defensa insistió en que la reconstrucción de los hechos presentaba inconsistencias y que no se habían considerado ciertos testimonios que beneficiaban al acusado.
Los argumentos de la Cámara
En su resolución, el juez Orso subrayó que la carga probatoria debe despejar cualquier duda razonable sobre la culpabilidad del acusado, lo que en este caso no habría sucedido. El magistrado también hizo referencia a la falta de memoria de la víctima como un elemento que, aunque relevante, no pudo ser asociado de manera inequívoca con una acción delictiva intencional por parte de B.V.
El fiscal Fernando Palmolelli argumentó en la audiencia que las pruebas materiales y testimoniales eran suficientes para mantener la condena, subrayando la gravedad del estado en el que fue encontrada la víctima y las evidencias que vinculaban al acusado con los hechos. Por su parte, Guillermo Benavidez centró su estrategia en destacar las inconsistencias del relato y cuestionar la adecuada valoración de los elementos presentados en el juicio de primera instancia. A su vez, el asesor de Menores Leandro Carozzo enfatizó la importancia de garantizar un debido proceso para el joven acusado, especialmente considerando su edad al momento de los hechos.
El abogado defensor Arsenio Domínguez aportó un enfoque adicional en su argumentación, insistiendo en que la recopilación de pruebas en la etapa inicial del caso presentó serias irregularidades, incluyendo omisiones en el protocolo de preservación de la escena. Además, subrayó que las lesiones referidas en el informe médico podrían no estar vinculadas directamente con el acusado y planteó la falta de pruebas claras sobre el contexto en el que ocurrió el encuentro entre la víctima y el imputado. Domínguez también sostuvo que no se había considerado adecuadamente el testimonio de personas cercanas al acusado, quienes lo describieron como alguien incapaz de actuar de manera violenta.
Asimismo, se tomó en cuenta la edad del acusado al momento de los hechos —17 años— y la posibilidad de que no haya tenido plena percepción de la gravedad de la situación.
La absolución de B.V. ha generado reacciones divididas. Mientras la defensa celebró la decisión como un triunfo de la presunción de inocencia, desde sectores vinculados a la víctima expresaron su desacuerdo con la resolución y adelantaron que evaluarán los pasos legales a seguir, entre ellos, un posible recurso ante la Corte Suprema provincial.
Con esta decisión de Cámara, el proceso judicial que durante dos años estuvo en el centro del debate público concluye, al menos de manera provisoria, con la absolución del joven acusado. Resta conocer si el Ministerio Público optará por recurrir a otras instancias judiciales.