El subsecretario de Empleo de Santa Fe, Eduardo Massot, uno de los funcionarios a cargo de la negociación paritaria, lamentó la decisión de los gremios docentes de optar por una medida de fuerza de 96 horas ante la primera oferta salarial y reconoció que se está analizando “si los convocamos entre medio de las dos medidas de fuerza”, con el objetivo de no extender el conflicto y lograr el dictado de clases.
“Vamos a evaluar los pasos a seguir, en general nosotros cuando hay un paro no convocamos a una nueva reunión paritaria hasta que no finalice, pero ahora va a ser analizado porque la idea del gobierno es que el salario le gane a la inflación, y llevar adelante la paritaria con los chicos y las chicas en las aulas”, declaró el funcionario en diálogo con VerTV.
El integrante de la cartera de Trabajo recordó que la propuesta salarial asciende al 33,5 por ciento en tres tramos: 17,5 por ciento en marzo, 8 en mayo y el 8 restante en julio, “con dos revisiones que permiten que la pérdida del poder adquisitivo de los salarios y la inflación sean monitoreadas y se revea el aumento otorgado. Esto ya pasó en septiembre y diciembre del año pasado, cuando se otorgaron aumentos superiores”, recordó.
Por eso el funcionario lamentó que “hay dos días de paro esta semana y dos días la próxima, y el gobierno va a analizar si habrá una mejora de la propuesta salarial y de la propuesta paritaria no salarial, definiendo si los convocamos entre medio de las dos medidas de fuerza o con posterioridad”.
En tal sentido, Massot advirtió que “la huelga es el no diálogo, por eso es muy difícil iniciar un debate en medio de una medida de fuerza, porque eso traba todo. Esto funciona a través del diálogo, el año pasado hubo 17 días de paro de Amsafe en el segundo semestre, y la solución vino de la mesa paritaria y no de la medida de fuerza”.
Apuntando directamente contra el gremio docente mayoritario, el secretario de Empleo expresó: “Hace más de diez años que en Santa Fe las clases no comienzan cuando está previsto por medidas de fuerza, pasan los gobiernos, Amsafe queda y el mecanismo que ellos tienen para resolver estos temas perjudica a la ciudadanía. Nosotros somos respetuosos de la democracia sindical, pero no compartimos medidas extremas ante el inicio de una paritaria”.
Cuando se le hizo notar la contundencia del rechazo ante la oferta realizada, Massot reconoció que “la inflación conspira contra cualquier paritaria. Más allá del esfuerzo que se hace para concretar la oferta, equiparando la propuesta nacional, entendemos que la verdad está en el bolsillo de los trabajadores y el supermercado, y la situación no es la mejor”.
Por último, anticipó que se está analizando una oferta superadora, como así también la posibilidad de descontar los días no trabajados: “Todo se evalúa, no hay ninguna decisión tomada”, concluyó.