Primero fue Jorge Molina  quien abrió el debate diciendo que“Podemos negociar otra política que no sea cláusula gatillo”. Señaló que esta postura es parte de la decisión de ser “responsables” ante la situación deficitaria que reconoce en la provincia y que también deriva de una crisis económica general.

“Siempre vamos a privilegiar la posibilidad del mantenimiento del empleo y del cobro de los salarios. Nunca pusimos en juego la gobernabilidad, ni la realidad económica de la provincia”, dijo el secretario general de Upcn, tras reconocer que quizá la cláusula gatillo no sea la política de actualización del salario a negociar el próximo año atento a las nuevas alternativas que se diseñarán a nivel nacional y que buscarán “desindexar” la economía.

Recordó que la cláusula gatillo se aplicó en Santa Fe “cuando los equilibrios presupuestarios de egresos e ingresos eran solventes”; situación que hoy para Molina no se repite por “la retracción de partidas nacionales en diferentes áreas”, la baja de la actividad económica y productiva, entre otras variables negativas; que se traducen en un déficit en la economía provincial.

Apuntó entonces que hoy la provincia es la única que mantiene vigente esta herramienta de actualización paritaria -a la que calificó de “extraordinaria”-, luego de que Córdoba -que suele compararse con Santa Fe en términos políticos, sociales y económicos- en 2019 decidió desactivarla.

Desde ATE en cambio insisten en que este esquema de actualización salarial no se negocia, aunque reconocen la crítica situación económica de la provincia y admiten el diálogo para discutir nuevas alternativas, siempre y cuando “se preserve y recupere el poder adquisitivo de los trabajadores del Estado”.

Marcelo Delfor, secretario general adjunto de gremio, brindó una descripción similar a la de Upcn en relación a la profunda crisis económica del país y de la provincia. Pero a pesar de esto confirmó que a criterio del gremio “no es una situación que impida cumplir con los acuerdos salariales ya establecidos” en la paritaria asumida a principio de este año por el equipo de Lifschitz.

Delfor dijo que con Omar Perotti buscarán consensuar una “política salarial que al menos sostenga el poder adquisitivo y recupere lo que en este tiempo venimos perdiendo, porque más allá de la cláusula gatillo -vigente- el impacto que han tenido los incrementos en nuestros salarios ha sido muy importante”.

Si bien Delfor destacó que están “abiertos a discutir distintas alternativas”, en este contexto de crisis “la cláusula es innegociable. Conocemos el objetivo de Perotti. No va a tomar ninguna medida que implique que los trabajadores perdamos. En ese sentido, los sindicatos, en particular ATE, van a hacer todo para que no suceda. Ese es el rol que tenemos los sindicatos”, finalizó.