En un fallo dictado por el juez Adrián Godoy en los tribunales de Venado Tuerto, Guillermo Damián Gómez, de 45 años, fue condenado a seis años de prisión efectiva por ser autor del delito de tentativa de homicidio. La sentencia fue dispuesta en el marco de un juicio abreviado que contó con la participación del fiscal Eduardo Lago.
El hecho juzgado ocurrió el sábado 17 de febrero del año pasado, entre las 19 y las 19:30, en la localidad de Murphy. Según la investigación del Ministerio Público de la Acusación (MPA), Gómez y un amigo –también condenado en el mismo legajo– se trasladaban en una camioneta cuando divisaron a la víctima, Santiago Admella, con quien su empleador mantenía un conflicto previo.
Fue entonces que, en la intersección de Balcarce y Rivadavia, ambos descendieron del vehículo y corrieron al hombre. Una vez que lo alcanzaron, Gómez lo apuñaló en reiteradas oportunidades, causándole heridas de gravedad que obligaron a una intervención quirúrgica de urgencia. La víctima permaneció varias semanas internada en terapia intensiva, con asistencia respiratoria, y su estado fue considerado crítico durante un extenso período.
De acuerdo al fiscal Lago, el ataque tuvo una violencia tal que las heridas podrían haber provocado la muerte de Admella. La víctima fue informada de la resolución judicial y manifestó su conformidad con el acuerdo alcanzado.
Cabe recordar que el hecho no solo involucró a los autores materiales, sino también a un empresario de 49 años, identificado por sus iniciales como RAG, dueño de una empresa de pavimentación de Murphy, quien está imputado como instigador del intento de homicidio. Según la acusación, fue él quien ordenó a sus empleados –entre ellos, Gómez– concretar la agresión. RAG permanece detenido con prisión preventiva, luego de que el mismo juez Godoy hiciera lugar al pedido del fiscal, quien advirtió sobre “peligros procesales latentes”.
En tanto, los dos hijos del empresario, detenidos por realizar publicaciones intimidatorias en redes sociales, fueron liberados bajo fianza tras ser imputados por intimidación pública y apología del delito.
Mientras avanza la causa contra el presunto instigador, la condena a Gómez marca el primer cierre judicial en uno de los episodios de violencia más conmocionantes registrados en Murphy en el último tiempo.