LIMA (Reuters) – Ollanta Humala, un militar retirado que inquieta a los mercados financieros por su pasado anticapitalista, se declaró el domingo ganador de la elección presidencial de Perú y ratificó sus promesas de combatir la pobreza que persiste en el país pese a la bonanza económica.
Según el organismo electoral, Humala, quien sedujo a muchos con la moderación de su discurso radical, superaba con una mínima ventaja a la conservadora Keiko Fujimori, hija del encarcelado ex presidente Alberto Fujimori en la segunda vuelta electoral, una de las más reñidas en las historia del país.
"El resultado electoral indica, tanto el conteo rápido como las informaciones brindadas por la ONPE (organismo electoral), que hemos ganado las elecciones presidenciales", dijo Humala en una declaración a periodistas. Luego partió a festejar con sus simpatizantes a una plaza en el centro de Lima. El triunfo de Humala podría traer turbulencias durante un tiempo a los mercados financieros, según analistas, las cuales podrían despejarse si el candidato muestra señales de que su nacionalismo no pondrá en juego el auge económico peruano.
Humala obtenía un 50,706 por ciento los votos y Fujimori un 49,294 por ciento con el 81,179 por ciento de las actas de sufragios contabilizadas por la oficina electoral, una diferencia de alrededor de 181.000 votos, según un boletín divulgado cerca de la medianoche del domingo.
En un primer reporte del organismo la diferencia era poco más de 20.000 votos.
Conteos rápidos y sondeos a boca de urnas de tres encuestadoras divulgados previamente daban una ventaja mayor a Humala sobre Fujimori, de al menos 2,6 puntos porcentuales y de hasta 5 puntos.
La cerrada diferencia, de alrededor de 20.600 votos, llevaba a analistas a advertir que es muy pronto para descartar un reconteo de votos, aunque los seguidores de Humala ya estaban celebrando.
"¡Humala presidente!", gritaban partidarios del nacionalista en el centro de Lima, agitando banderas rojas y blancas en medio de una concentración de unas 5.000 personas.
"Fujimori nunca más", decía otra pancarta.
El nuevo presidente de Perú, un gran exportador de minerales, recibirá un país que registra un crecimiento económico entre los más altos de mundo, pero que no podido sacar de la pobreza a un tercio de su población.
También deberá lidiar con un Congreso dividido donde ninguna fuerza política es mayoritaria.
La derrota. En los predios del comando de campaña de Fujimori, de 36 años, no había euforia y cerca de 200 simpatizantes estaban frente a un hotel de Lima donde la candidata esperaba los resultados oficiales.
"Si es que los resultados oficiales de la ONPE (organismo electoral) ratifican la diferencia que hemos visto en los conteos rápidos, pues seré la primera en reconocer los resultados", dijo Fujimori en un breve discurso a sus seguidores antes de conocerse los primeros resultados oficiales.
Para Humala, este es el segundo intento por ganar la presidencia luego de perder en el 2006 un balotaje frente al actual presidente Alan García, en gran parte por los temores que generaron sus propuestas radicales de izquierda.
El líder nacionalista que hace una década intentó derrocar al padre de su contendora, moderó su anterior discurso radical durante esta campaña y hasta suavizó sus propuestas de gobierno para atraer votantes de centro y calmar a los inversionistas.
Asimismo, prometió que seguirá un modelo más parecido al del ex presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva que el de su otrora aliado, el mandatario venezolano Hugo Chávez, uno de los mayores líderes de la izquierda en Latinoamérica.
"Hemos ganado todos los peruanos que no queríamos que nuestra democracia se desplomara y que resucitara toda una mafia que destruyó nuestras instituciones, saqueó los recursos públicos, llenó de sangre, de sufrimiento nuestro país", dijo el escritor y Premio Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa.
"Hubiera sido terrible que la imagen del Perú se ensuciara de esa manera con la reivindicación de una dictadura", agregó Vargas Llosa quien apoyó fuertemente la candidatura de Humala.
El partido de Humala dijo en un comunicado que el candidato recibió una llamada telefónica del presidente chileno, Sebastián Piñera, para expresarle su saludo "por los resultados electorales que indican su victoria".