Mueren más de 20 refugiados y unos 300 resultan heridos en territorio de Siria
Conmemorando otro aniversario de la Guerra de los seis días de 1967, Centenares de palestinos se concentraron en la línea que separa siria del territorio de este país ocupado por Israel en el Golán, antes de que llegaran hasta la frontera, soldados israelíes abrieron fuego produciendo la muerte de al menos 20 manifestantes.
Los manifestantes, se estima que en su mayoría palestinos refugiados, habrían intentado salta las barreras han intentado saltar las barreras, como ya sucedió el 15 de mayo pasado, durante el aniversario de la guerra del 48 (en aquella oportunidad fueron asesinadas 13 personas). Según informa el diario El País, esta vez los soldados israelíes dispararon contra la pequeña multitud antes de que se acercara a la línea divisoria.
“La conmemoración palestina de la "naksa" (retroceso), la pérdida de Jerusalén Oriental, Cisjordania y Gaza tras la guerra de 1967, ha sido muy parecida a la de la "nakba" (catástrofe), el exilio masivo tras la guerra de 1948. De nuevo se ha utilizado como modelo la protesta pacífica que caracteriza las revueltas árabes: la idea consiste en forzar los disparos israelíes, para recordar al mundo, con un puñado de cadáveres, que el conflicto seguía vivo y sin perspectivas de solución”, señaló Enric González, cronista de El País de España en la región.
Además del incidente fronterizo protagonizada por palestinos refugiados en Siria, un centenar de manifestantes personas marcharon hacia el puesto de control de Qalandiya, a medio camino entre Ramala (capital administrativa de la Autoridad Palestina) y Jerusalén. En Qalandiya, en este caso fueron más afortunados, ya que fueron dispersados con balas de goma, gases lacrimógenos y líquido pestilente sin que se registraran víctimas mortales. Ha habido al menos dos docenas de heridos entre los participantes en la protesta.
“Resulta bastante obvio que los incidentes en el Golán, un territorio sirio ocupado por Israel desde 1967, han gozado del patrocinio del Gobierno de Damasco. Las tropas fronterizas sirias no sólo han permitido el paso de los palestinos, sino que han facilitado autocares y han cavado una trinchera a unos 20 metros de la barrera para que se protegieran frente a los disparos israelíes”, señala en su crónica González.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu había advertido previamente de que sus soldados no permitirían una invasión en el Golán, por breve y pacífica que fuera, como la registrada el pasado 15 de mayo con motivo de la conmemoración de la "nakba". "He dado órdenes a nuestras fuerzas de seguridad para que actúen con determinación y mesura a la hora de proteger nuestra soberanía, nuestras ciudades y nuestros ciudadanos", dijo por la mañana del domingo Netanyahu.
El régimen sirio no se ha atrevido desde la guerra de 1973 a arriesgar un solo soldado para recuperar el Golán, pese a autoproclamarse campeón de la resistencia antisionista, y prefiere utilizar "delegados" para hostigar a Israel: Hezbolá en Líbano, Hamás en los territorios ocupados. Ahora delega en grupos de refugiados palestinos. Benyamin Netanyahu acusó al presidente de Siria, Bachar el Asad, de utilizar la tragedia palestina para apartar la atención mundial de las matanzas cotidianas que perpetraba contra su propia población. A pesar de su constante violación a los derechos humanos de los palestinos, en este caso parecía probable que Netanyahu tuviera razón afirmó El País, medio habitualmente muy crítico con las posiciones intransigentes y violentas de Israel contra los palestinos.
El Gobierno israelí teme que la previsible decepción de septiembre próximo, el mes que por razones diversas los palestinos habían establecido como punto de arranque de un Estado independiente, fomente la organización de marchas masivas hacia los puestos fronterizos. Eso obligaría al Ejército de Israel a perpetrar grandes matanzas de personas desarmadas y empeoraría sustancialmente su imagen internacional.
Fuente: El País de España