“Nos quedan pocas opciones, o dejamos caer el proyecto y arrancar de cero, lo cual significaría un año o dos más sin ampliación de gas; o hacer una obra reducida, dejando fuera a localidades, lo cual no es nuestra intención”, destacó el intendente, José Luis Freyre.
Aunque luego aclaró: “Al final entre todos decidimos ir juntos por más, donde la Nación no sólo reconozca una readecuación de precios, sino además que la Provincia, la Nación y Litoral Gas planifiquen la provisión de gas para los próximos 50 o 60 años, para ir incrementando los servicios en nuestro departamento y para lograr más conexiones, incluyendo a pueblos que hoy no están”.
De este modo Freyre resumió lo decidido en el encuentro realizado en tarde del lunes, en la sala de reuniones “Antonio Garnier” del Palacio Municipal. En dicho encuentro se evaluaron los pasos a seguir en torno al proyecto de ampliación del Gasoducto Regional Sur.
De la misma participaron intendentes y presidentes comunales, funcionarios, legisladores nacionales y provinciales, concejales, vecinalistas y miembros de cámaras empresariales y de las fuerzas vivas de la ciudad.
El mandatario recordó que hace unos años el Municipio de Venado Tuerto invirtió en troncales y estaciones reductoras para las obras de gas, para beneficiar a las industrias y a cada vecino. Luego, la empresa Litoral Gas comunicó que no se hacían más conexiones hasta que no se ampliara el gasoducto a la altura de Chabás, obra que costaba en su momento 10 millones de dólares.
“Ahí surgió quien costeaba esos recursos, que finalmente fue el Estado nacional, aprobando una obra de 190 millones de pesos que favorecía a Casilda, Firmat, Chapuy, Teodelina, Carmen, Murphy, Melincué y Venado Tuerto, y se armó un consorcio con las localidades alcanzadas”, explicó.
Seguidamente, aclaró que si bien no era el proyecto que ellos pretendían o el ideal, porque no resolvía el problema de llegar a más hogares o a localidades, era una base importante de inicio.
Se efectuaron dos licitaciones, una para la compra de los caños y otra para la ejecución de las obras propiamente dicha, donde se recibió un adelanto de 8 millones de pesos para la fabricación de la cañería. “Con el cambio de gobierno se dieron algunas situaciones, donde audita y supervisa la construcción de los caños y nos pide certificar para que paguemos 60 millones de pesos, a dólar actualizado, cuando en principio era de 39 millones de pesos”, puntualizó.
Así luego de resaltar las opciones decididas ayer, acotó por el momento, el Estado nacional reconoce los 190 millones de pesos, para pagar los 60 millones de caños y los 130 millones (precio 2014) para la ejecución de estos trabajos. “El problema es que no alcanza para cubrir la mano de obra ya que los costos han cambiado”, agregó Freyre.
A su vez, solicitarle a la Provincia que se involucre de pleno en el trabajo conjunto.