Las principales espadas del Frente Progresista Cívico y Social (FPCyS) se reunieron el lunes pasado en la ciudad de Santa Fe con el objetivo de sofocar los prematuros cortocircuitos con dirigentes radicales que vienen ostentando su buena sintonía con la Casa Rosada, además de perfilar la relación que la gestión de Miguel Lifschitz mantendrá con el gobierno de Mauricio Macri.
Como adelanto de un debate de fondo que, inexorablemente, la coalición santafesina abrirá en función de la próxima cita en las urnas (2017), socialistas, radicales y demás aliados (GEN, SI, Pares y Libres del Sur) trazaron un balance de los primeros 50 días de gobierno de Lifslo que viene. José Corral y Miguel Lifschitz, figuras clave para el futuro de la coalición santafesina. chitz (en general, la valoración fue positiva), como también delinearon parámetros del vínculo entre la Casa Gris y la administración de Macri.
Es que el intendente de Santa Fe y presidente de la UCR nacional, José Corral, avanzó con la propuesta de sumar al FPCyS a Cambiemos, iniciativa acorde al acuerdo político sellado entre el centenario partido y el PRO para a derrotar al kirchnerismo en la puja presidencial.
Pero Corral también fogoneó un mayor protagonismo radical dentro de la coalición santafesina. Paralelamente, no pocos socialistas se mostraron prudentes de cara a las primeras medidas del nuevo gobierno nacional.