Distintas demoras y desavenencias de la Oficina de Gestión Judicial (OGJ) provocaron que hoy martes por el vencimiento de plazos procesales quedará libre Ariel M de 44 años imputado como el autor homicidio del policía Leonardo Delgado (25 años) ocurrido el 23 de octubre del 2015 en una zona rural en jurisdicción de la localidad de Miguel Torres. En tanto, el ex comisario Sergio David acusado de ser el organizador del plan que culminó con el crimen y a quien además se lo imputó por 18 delitos quedó bajo la figura de prisión domiciliaria morigerada.
Dicha información fue confirmada a Venado 24 por el fiscal de la causa, Matías Merlo, quien detalló que la excarcelación de ambos fue producto del vencimiento de los plazos de prisión preventiva y la demora en la realización del juicio oral y público correspondiente. De todos modos, el funcionario judicial aclaró que espera que el juicio se realice en los primeros días de febrero del año próximo.
Merlo destacó que esto sucedió a pesar de la cuantiosa prueba acumulada desde el Ministerio Publico de la Acusación para llevar a juicio a los imputados. “Tenemos más de 400 hojas con los fundamentos, 120 testigos, exámenes de ADN confirmados, y todos los elementos suficientes para comprobar las imputaciones”, subrayó el fiscal. Al respecto cabe recordar que las audiencias imputativas se realizaron en noviembre del 2015, mientras que en octubre del 2017 desde el Ministerio Público de la Acusación presentaron las acusaciones, paso previo para que la OGJ designe el tribunal y llamé al juicio oral y público.
A Ariel M, se le atribuye ser el autor del homicidio calificado por ser la víctima personal de seguridad y por ensañamiento. En tanto a Sergio David se lo acusa de una larga lista de delitos: instigador de homicidio agravado por ensañamiento y por ser la víctima integrante de las fuerzas de seguridad; falsedad ideológica de instrumento público; violación de medios de prueba; hurto; tenencia de arma de fuego de uso civil; incumplimiento de los deberes de funcionario público; violación de medios de prueba, registros y documentos por haber sustraído y/o ocultado sumarios preventivos en los que se detallaba el accionar policial en 75 denuncias realizadas por vecinos en la comisaría de Fimat; por acopio de municiones por tener en su poder al menos 1.500 cartuchos y balas de distinta marca y calibre; robo por apoderarse de manera ilegítima de cuatro cubiertas destinadas a uno de los móviles de la comisaría de Chovet; y hurto por apoderarse de material de construcción destinado a refaccionar el techo de esa dependencia policial; un cargamento de soja que estaba en un camión secuestrado, y animales muertos que habían sido secuestrados en un procedimiento realizado en la zona.
Lo cierto es que distintas desavenencias que comenzaron con el atraso de las audiencias preliminares, recusaciones de magistrados y distintas falencias en el nombramiento de conjueces (entre ellas en los últimos días dos conjueces fueron impugnados por la falta de sorteo público de la lista) culminaron provocando que se vencieran los plazos procesales.
De hecho en los últimos días el papelón más grande fueron las desprolijidades ocurridas en el intento de nombrar un conjuez para la realización del Juicio. Dicha situación fue advertida por el Colegio de Abogados de la 3ª Circunscripción Judicial de la Provincia de Santa Fe, quienes alertaron públicamente sobre el tema. Así en un comunicado destacaron: ” (..) nos preocupa especialmente atento al inminente uso de la lista para conjuez en un juicio penal por homicidio más ocho causas conexas que insumirá más de uno o dos meses de jornadas completas de audiencia de juicio oral, donde deberá decidirse la condena a prisión perpetua solicitada por el Ministerio Público de la Acusación o la absolución del acusado”.
Y agregaban: “Todo ello implicaría para el profesional sorteado, prácticamente no poder ejercer su labor profesional de manera particular dado que las audiencias son con presencia continua del conjuez. Es importante remarcar las implicancias que genera de cara al futuro éste precedente”
En ese sentido, Merlo insistió que desde el Ministerio Público de la Acusación hicieron todo lo posible para cumplir con los tiempos, entre otras cosas realizó una presentación ante el fiscal general de la provincia, Jorge Baclini y éste luego elevó el reclamo ante la Corte Suprema de Justicia.
El crimen de Delgado
Delgado tenía 27 años, era oriundo de la ciudad de Vera y trabajó durante dos años en la seccional de Chovet antes de recalar en Miguel Torres, un pueblo ubicado a 15 kilómetros, luego de haber pedido un traslado por motivos que en su momento no habían quedado claros.
El viernes 23 de octubre de 2015, alrededor de las 4 de la mañana, mientras realizaba su primera guardia en esa dependencia, fue hallado asesinado en la camioneta Volkswagen Amarok de la comisaría en el tramo de la ruta 14 que une Miguel Torres con Bombal a partir del llamado de un camionero que avisó sobre un móvil policial estacionado sobre la banquina.
El agente tenía una puñalada letal a la altura del cuello y diversas marcas de arma blanca en ambos brazos, algunas de las cuales serían defensivas. “Tenía puñaladas en los dos brazos y las manos, lo que demuestra que el policía se defendió de la agresión”, dijo entonces una fuente de la investigación.
Llamó la atención que el agente no tuviera consigo su celular y el arma reglamentaria, que al parecer había dejado en la comisaría.
Entre las hipótesis sobre el crimen, se cree que Delgado había rehusado participar en esos hechos ilícitos que eran comandados por el comisario y por eso pudo ser asesinado ante la posibilidad de que no guardara silencio.