Martín Ocampo es el fiscal general porteño encargado de investigar lo que sucedió en la Bombonera en la noche del jueves. Es un ex legislador por el PRO, y fue puesto en su cargo por Daniel Angelici, que antes de ser el hombre del macrismo en Boca era el operador del jefe de gobierno porteño ante la justicia porteña. Por otra parte, la información, chequeada por este medio, fue difundida por Télam a partir de notas de opinión que ya intentan facturarle directamente a Mauricio Macri la responsabilidad del hecho. Más allá de la intencionalidad política, la responsabilidad de Boca, institución controlada por el macrismo, es innegable.
Por otra parte, el diario Perfil sostuvo hoy que las conjeturas judiciales del propio Ocampo apuntan a la Policía Federal, estimándose una “liberación de zona”. En otras palabras, hoy el hecho del jueves se está transformando en un pase de facturas entre el gobierno nacional y el capitalino, de cara a las elecciones presidenciales.
La influencia de Angelici en el ambiente judicial capitalino fue lo que le permitió imponer a Martín Ocampo, un ex abogado del mundo corporativo, como fiscal general de la Ciudad, es decir el jefe del Ministerio Público porteño. Antes de ocupar ese lugar, Ocampo fue legislador del PRO, cargo al que también por intermedio del presidente xeneixe.
Ayer a la noche, el fiscal Ocampo decidió la clausura de La Bombonera para iniciar la investigación por el escándalo que determinó la suspensión del superclásico y que dejó al Xeneixe al borde de la eliminación y de una sanción durísima, consignó la agencia Télam.
El panorama en el campeonato asoma preocupante para el equipo del sur de la capital, que no solo perdería los puntos del partido y se quedaría fuera de la Copa. Pero el club xeneixe podría además recibir graves sanciones institucionales. Angelici, quien pidió ante las cámaras “no quedar como rehén de los violentos”, en alusión a su intento de no sufrir una clausura por lo que estimó responsabilidades de terceros.
Zona liberada
La pista que apunta a una interna en la barra brava de Boca cobró fuerza en las últimas horas. Si bien fuentes judiciales dicitadas por el diario Perfil, el agresor “todavía no pudo ser identificado”, al cierre de esta edición trascendió que el ataque habría sido ejecutado por una facción que busca desplazar a los actuales jefes de “La 12”, Rafael Di Zeo y Mauro Martín. Otro dato es que los jugadores de River habrían sido rociados con un preparado casero conocido como “mostacero”.
La hipótesis sobre un accionar imprudente de un efectivo policial que estaba en la manga quedó prácticamente descartada, a partir de los distintos testimonios recabados por la Justicia y los resultados de los primeros peritajes. Fuentes policiales dijeron que el gas provino desde la tribuna ya que los únicos que lo portan son los efectivos del D.O.U.C.A.D y del Cuerpo de Infantería, y no se encontraban en ese lugar.
Según dijeron al diario Perfil voceros oficiales del Ministerio de Seguridad de la Nación, el gas pimienta que utiliza la Federal es blanco y no rosado como el que fue utilizado en el ataque contra los futbolistas millonarios. En la pericia que hizo la fuerza de seguridad se encontró un compuesto, llamado cacsicum, que es el principio activo del gas pimienta, pero con un pigmento naranja.