Sociedad y PolíticaA medida del inversor: el kirchnerismo obtuvo una nueva ley de hidrocarburos

Tomás Lüders30/10/2014
Compartir esta noticia
Share on Facebook
Facebook
Tweet about this on Twitter
Twitter

Tras un largo debate que duró hasta la madrugada, la Cámara de Diputados el oficialismo logró, con 130 votos a favor, 116 en contra y una abstención, convertir en ley esta madrugada un nuevo proyecto fundacional que no estuvo dispuesto a discutir: un nuevo régimen de hidrocarburos. La iniciativa recibió el rechazo unánime de la oposición.

El proyecto resta poder a las provincias con hidrocarburos, y no incluye normas ambientales para el control del fracking.

El objetivo es atraer inversiones petroleras. Se recortan regalías y se extienden plazos de concesión

 camara-de-diputados-argentina

Menos soberanía

La nueva ley reconoce el dominio del subsuelo a las provincias, pero crea un marco regulatorio único para todo el país. Una decisión que va en contrario sentido a lo que el kirchnerismo deseaba en los 90s, cuando contralaba Santa Cruz y deseaba obtener mayores regalías para su provincia. En ese entonces jugó un rol clave en la segunda y completa privatización de YPF, que fue luego vendida a Repsol. El todopoderoso enemigo que de ponerse de rodillas, terminó indemnizado en varios de miles de millones de dólares.

Hoy el kirchnerismo controla el estado nacional, entonces el objetivo es ponerle más límites al control federal sobre las reservas de hidrocarburos.

El nuevo proyecto dispone la ampliación de los plazos de concesión, se establece una promoción fiscal para los proyectos de inversión de más de 250 millones de dólares, se pone un tope de 12% a las regalías (que puede elevarse hasta 18% en caso de prórroga) y se elimina la posibilidad del “acarreo”, esto es, que las provincias se integren como socios de los proyectos sin hacer la inversión correspondiente.

Las críticas de la oposición se centraron en dos puntos: la falta de una regulación ambiental para evitar los eventuales daños que se atribuyen al fracking, el método de estimulación hidráulica usado para la extracción de hidrocarburos no convencionales, y el tope del 12 por ciento en las regalías.

También se escucharon quejas porque permitirá extensos períodos de concesiones (35 años en algunos casos prorrogables por otros 10) y porque habilita a un concesionario a extender la explotación de un yacimiento convencional cuando éste se encuentre vinculado a uno de hidrocarburos no convencional.

El proyecto mereció además fuertes críticas de los ex secretarios de Energía de los sucesivos gobiernos desde 1983 hasta el kirchnerismo.

Con esta iniciativa, el Gobierno pretende atraer las inversiones necesarias para la exploración y explotación de los yacimientos instalados en nuestro país, con el propósito de recuperar el autoabastecimiento energético, perdido durante la gestión kirchnerista. En cambio, los bloques de la oposición advierten que el proyecto oficial avasalla las autonomías provinciales (al establecer contratos tipo sin la aprobación de las Legislaturas locales) y que perjudica a los distritos, al limitarle al 12% el nivel de regalías (que pueden llegar al 18% en una segunda prórroga de la concesión) que podrán percibir por la explotación de los recursos de sus subsuelos.

El presidente de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez, defendió hoy la reforma a la ley de hidrocarburos al afirmar que con la iniciativa se busca “la soberanía energética frente al parque jurásico que siempre pretende volver al pasado”.

Domínguez explicó que el proyecto “tiene su origen en la nacionalización de YPF” y “marca un nuevo destino de la Patria hacia el autoabastecimiento hidrocarburífero”.

Agencia DyNcamara-de-diputados-argentina

https://www.venado24.com.ar/archivos24/uploads/2019/07/ESTEVEZ-BANNER-WEB-OKEY.gif