Después los anuncios de la presidenta Cristina Kirchner para el área de Inteligencia, el periodista Gerardo “Tato” Young, autor de una reconocida investigación sobre la agencia de inteligencia argentina, sostuvo hoy durante una entrevista con la cadena de noticias del Grupo Clarín (TN) que “la pelea del gobierno con la SIDE comenzó el 2013″, tras la oficialización del acuerdo de “entendimiento” con Irán. La purga que hace un mes eliminó a los todos poderosos Stiusso y Larcher fue entonces una ruptura esperada.
Según Young, el sorpresivo pacto habría producido el enojo de Antonio “Jaime” Stiusso, por entonces director de operaciones de la Secretaría de Inteligencia. Stiusso habría sido designado por el propio Néstor Kirchner en 2004 para fortalecer la llamada “Pista Iraní” en la investigación del difunto Nisman.
Consultado sobre por qué la democracia no ha logrado ordenar el área de inteligencia argentina, Young sostuvo que todos los presidentes “se fascinan” con el poder que les ofrece esta área y terminan siendo condicionados por ella: “Los presidentes de turno los usan, los aprovechan, todos dicen que lo van a cambiar pero lo dejan, se fascinan”, aseguró. “Todos llegan con la promesa de reformar los servicios, y después se fascinan con el espionaje”, insistió, en declaraciones al “houseorgan” de Clarín en TN, A dos voces.
En este sentido, afirmó que mientras el expresidente Néstor Kirchner estaba “fascinado” con los servicios, su esposa “se alejó para dar paso a la fuerza militar”, a la que se le aumentó en gran parte el presupuesto destinado a este sector. “Cristina sintió que la SIDE la abandonó y no la cuidó”, comparó.
“Hay una ruptura con la SIDE en 2013, con el memorando con Irán: fue una ruptura con Stiusso, que investigó desde el principio, 1994, el atentado a la AMIA”, explicó. Y dijo que también hubo un alejamiento con Francisco “Paco” Larcher, exnúmero dos del organismo, “por el acercamiento al massismo”, aseguró.
Por último, consideró “positivo” transferir el área de escuchas telefónicas a la Procuración General de la Nación: “Es positivo sacarle las escuchas a Inteligencia, esto sí podría ser un paso adelante, dentro de todo este universo de oscuridad. La SIDE no va a cambiar, salvo que le saquen las escuchas telefónicas. No puede tener la influencia que tiene sobre la Justicia”, concluyó.