Los candidatos que llegaron al ballottage de la Ciudad para definir quién será el sucesor de Mauricio Macri en la Jefatura de Gobierno eligieron la misma hora para ir a votar. Veinte minutos antes de las 12, Horacio Rodríguez Larreta y Martín Lousteau se dejaron ver en las sedes donde debían sufragar.
El candidato de ECO llegó solo al colegio Children, ubicado en Charcas 3949. Tal como sucedió en las elecciones generales, los canales de televisión no pudieron registrar imágenes del momento en que el economista imprimió su elección en las nuevas computadoras. Minutos más tarde contestó algunas preguntas de los medios y saludó cuando un automovilista vitoreó su nombre con “bocinazos”.
“Me dicen que vino menos gente a votar. No sabemos si es por la hora o porque están cansados porque es el tercer proceso”, analizó. Contó que compartirá el día con su mujer y su cuñada antes de ir a esperar los resultados al búnker.
Rodríguez Larreta cumplió con el ritual en la Facultad de Derecho de la UBA. Esta vez no tuvo problemas con el troquel, como hace dos semanas. Además acompañó a su mujer, Bárbara Diez, quien emitió el sufragio en el mismo lugar.
“Ahora voy a almorzar en familia y dormir una siesta”, anticipó. Más temprano, tras el tradicional desayuno en el Café Tortoni, fue junto a su mujer a la misa en la iglesia de San Expedito.
La tercera votación porteña
Primero fueron las PASO y luego, las elecciones generales. La de hoy es la tercera vez que los porteños concurren a las urnas, en este caso, para decidir al ganador del ballotage que define al próxima jefe de Gobierno entre los candidatos de Unión PRO y ECO, Horacio Rodríguez Larreta y Martín Lousteau, respectivamente, que buscan suceder a Mauricio Macri en el Ejecutivo de la Ciudad.
Hace dos semanas, Rodríguez Larreta y Lousteau terminaron a la cabeza de la carrera por llegar a una segunda vuelta más que esperable, dado que en la Ciudad de Buenos Aires hay que conseguir más de la mitad de los sufragios para evitar el ballotage. El jefe de Gabinete recibió 832.619 votos, que representaron el 45,55% del total, y al diputado lo apoyaron 465.583 porteños, es decir, el 25,47% del padrón. En el camino quedaron el kirchnerista Mariano Recalde, Luis Zamora (Autodeterminación y Libertad) y Myriam Bregman (Frente de Izquierda).
De cara a esta segunda vuelta electoral, el funcionario porteño y el ex ministro de Economía intensificaron sus respectivas campañas: el primero insistió en el valor del PRO como “equipo” y apuntó a captar los votos que hace dos semanas fueron para otros espacios, mientras que el diputado de SUMA+ redobló sus críticas a la administración macrista.
La disputa más resonante se dio en torno al voto en blanco. Es que el PRO propuso que ocupara el mismo lugar en la pantalla que las opciones de los candidatos, mientras que ECO sostuvo que debía mantener el espacio -en la margen inferior izquierda- que tuvo en las elecciones del 5 de julio. Finalmente, el Tribunal Superior de Justicia se inclinó por una alternativa a ambas, que de todos modos no conformó a Lousteau.
Los 2.541.642 ciudadanos argentinos y 14.211 extranjeros habilitados para votar vía boleta electrónica están habilitados para votar en 7.377 mesas distribuidas en 811 escuelas.
Como es tradición en el PRO, Rodríguez Larreta inició a las 8 de la mañana la jornada electoral con un desayuno con periodistas en el tradicional Café Tortoni. Allí se mostró con su compañero de fórmula, Diego Santilli, y referentes del gobierno porteño, como la vicejefa María Eugenia Vidal –que necesita visibilizar su candidatura en la Provincia de Buenos Aires– y el ministro de Justicia y Seguridad, Guillermo Montenegro, entre otros.
Lousteau, en tanto, compartió un desayuno con periodistas desde las 9 en el Bar El Banderín, ubicado en Guardia Vieja y Billinghurst, en Almagro, también junto a su candidato a vice, Fernando Sánchez, y legisladores porteños, diputados y dirigentes de ECO.
Por la tarde, Rodríguez Larreta aguardará desde las 18 los resultados en el tradicional búnker de PRO, en Costa Salguero, el mismo predio que recientemente utilizó el precandidato presidencial del Frente para la Victoria, Daniel Scioli, para lanzar la campaña del kirchnerismo con una cena recaudatoria.
Además de los habituales globos de colores, el funcionario porteño estará acompañado en el bunker y el escenario por Macri, quien espera una victoria de su delfín para capitalizar el resultado para su sueño presidencial, luego de la derrota de Miguel del Sel en Santa Fe. Un triunfo sería simbólicamente importante, ya que en juego están los ocho años de gestión del PRO en la Ciudad. Habrá que ver cuánto del 63,3% de los porteños que acompañaron a su partido en la segunda vuelta hace cuatro años renuevan la confianza en Rodríguez Larreta.
En tanto, el binomio de ECO esperará los resultados en el Palais Rouge, en Salguero 1441, un recinto elegido frecuentemente para distintas actividades por una de las fundadoras del espacio, Elisa Carrió, aunque la diputada no se hizo presente el día de la primera vuelta.