PolíticaEl Sciolismo evalúa los costos de no haber participado del debate y amagan con ser parte de uno nuevo. Aníbal Fernández le marca la cancha

Tomás Lüders06/10/2015
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Tras las repercusiones por el faltazo del domingo, que incluyeron todo tipo de bromas y fotomontajes circulando por las redes sociales, en el círculo íntimo del gobernador bonaerense se estudian la posibilidad deasistir a un nuevo debate presidencial antes de las elecciones.

De acuerdo a las repercusiones, el candidato presidencial del FPV pareció reforzar su perfil de dependiente de la aprobación de la presidente Cristina Fernández de Kirchner en lugar de proyectar la tan anhelada imagen de autonomía.

Quien volivó a dejar la puerta abierta a esa instancia fue el coordinador de la campaña presidencial del gobernador bonaerense, Jorge Telerman. “Probablemente si hay reglas claras y sinceras Scioli pueda concurrir a un debate presidencial”, dijo el funcionario en diálogo con radio La Red. Telerman había empeñado ya la palabra del gobernador antes del último debate.

“La predisposición de Daniel en toda su carrera fue la de debatir y que los argentinos escuchen sus propuestas. Ojalá se puedan encontrar las formas con debate”, abundó Telerman. El debate organizado por la ONG Argentina Debate al que Daniel Scioli dio el faltazo había sido pensado sin embargo con una enorme cantidad de reglas que les evitaban a los candidatos tener que salirse de sus prearmados guion, algo demandado sobre todo por los equipos del primer y segundo candidato, quienes son quienes más sienten que tienen que perder en el marco de una discusión.

La nueva postura del sciolismo es una respuesta al desafío que desde ayer plantea la oposición para que el postulante del Frente para la Victoria acceda a debatir en vivo, luego de la amplia repercusión que tuvo el evento en la Facultad de Derecho de la UBA.

Mauricio Macri y Sergio Massa invitaron a Scioli a discutir en una nueva cita, aunque el tema en discordia ahora es cuándo: antes o después de la primera vuelta.

Los coqueteos del sciolismo generaron resistencia en el kirchnerismo duro, cuyo vocero Aníbal Fernández parece hablar en nombre de las directivas presidenciales: “No tiene ningún sentido que el candidato del kirchnerismo participe de un eventual segundo debate” dijo el jefe de Gabinete.

“Fue un debate deslucido, sin formación, sin poner sobre la mesa un solo tema con criterio”, aseguró el funcionario y candidato a gobernador sobre el encuentro entre cinco de los postulantes a la presidencia organizado el domingo pasado por Argentina Debate. Fernández no aclaró que lo deslucido del debate obedeció sobre todo a las demandas de los equipos de campaña de Scioli y Macri.

Según el ministro coordinador, Scioli no debería ir a un nuevo debate, tal como le pidieron Macri y Massa, ya que “es un show mediático muy chiquito, módico”.

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