Durante su última Cumbre de las Américas, Cristina Kirchner realizó fuertes críticas a Estados Unidos por su política exterior y en materia de seguridad nacional. También destacó la presencia de Cuba por primera vez en el encuentro.
Durante el plenario de presidentes, la mandataria comparó el conflicto entre Venezuela y EE.UU. con el enfrentamiento diplomático con el Reino Unido por Malvinas
No obstante, la presidente argentina valoró como “positiva” la apertura del gobierno de Estados Unidos hacia Cuba y destacó que la isla caribeña “luchó durante más de 60 años con una dignidad sin precedentes” y sufrió “muchísimas penurias”. De manera similar se había expresado el líder venezolano Nicolás Maduro, ya que tras criticar a la política exterior “imperialista”, ofreció su “mano tendida al gobierno de los Estados Unidos”.
“Esta es una cumbre histórica porque por primera vez participa Cuba. Por favor, no nos confundamos. Consideramos positivo que el presidente Obama haya reiniciado el diálogo, pero Cuba no está aquí por eso. Está aquí porque luchó más de 60 años con una dignidad sin precedentes”, argumentó la Presidenta en el comienzo de su discurso.
“Estábamos contentos por esta noticia cuando de repente se firma un decreto que declara a Venezuela como amenaza para la seguridad de los Estados Unidos. Les confieso a mis colegas que cuando escuché la noticia dije que debía ser un error. No me surgió una respuesta anti-imperialista: lo primero que hice fue reírme porque resulta inverosímil que cualquier país de nuestro continente puede resultar una amenaza para la mayor potencia del mundo”, afirmó Cristina Kirchner en una de los tramos más encendidos de su discurso.
“Si querían enfrentar a Venezuela deberían haber encontrado otra forma porque nadie puede creer esto. Como nadie puede creer que el Reino Unido pueda declarar una amenaza a mi país (en referencia al conflicto por Malvinas). Absurdo también. Me llamó la atención la similitud de los casos”, dijo, irónica, la mandataria.
“Es una pena que esta cumbre se va ensombrecida por esta decisión y pedimos que ese decreto sea dejado de lado. Simplemente, les pido apelar a sentido común. Perón decía que se vuelve de cualquier lugar, menos del ridículo. Y es ridículo considerarnos una amenaza”, cerró Cristina Kirchner.