El Flaco debió trabajar más de lo esperado para doblegar al sudafricano Kevin Anderson (35°) por 3-6, 6-3, 6-4, 4-6 y 6-2, tras tres horas y 21 minutos de juego.
Fue un cruce de estilos, con el argentino como típico jugador de polvo de ladrillo (43 tiros ganadores y 16 errores no forzados) y el europeo decido a jugar puntos rápidos en un matar o morir constante (100 y 77).
El oriundo de Ciudad Evita volverá a jugar el sábado por tercera ronda, instancia a la que no accedía desde 2004. Será ante el checo Lukas Rosol (111°), quien venció al austríaco Jurgen Melzer (8°) en cinco sets.